El Principado considera un "insulto a la inteligencia" las explicaciones de AENA

La pista de Santiago del Monte será la más corta de España

La Consejería de Fomento ha calificado de insulto a la inteligencia de los asturianos la explicación dada por AENA sobre el proyecto de recorte de la pista de Santiago del Monte.

Desde el Principado aseguran que la opción elegida para cumplir la normativa de seguridad es la más perjudicial para el futuro del aeropuerto asturiano.

La pista será la más corta de toda España entre los aeropuertos de categoría dos, aquellos que reciben anualmente entre medio millón y dos millones de viajeros.

La consejería critica que los responsables de AENA no vinculen el recorte de la pista a la pérdida de competitividad del aeropuerto, cuando en otros aeródromos se une la llegada de nuevas rutas y tipos de aviones a incremento de la longitud de la pistas.

En Asturias la pista 29, que recibe el 80 % de las operaciones que se hacen en Santiago del Monte, perderá 150 metros tras el proyecto presentado por AENA. No será una tala de 150 metros, pero sí un repintado que la dejará en 2050 metros, frente a los 2.200 actuales. La modificación, dicen los pilotos, afectará a la operatividad del aeropuerto.

Los aviones que operan actualmente en el aeropuerto, los airbus 320 y 319 y el boing 737 deberán llevar menos combustible y pasajeros y el 330, que cubrió este verano la conexión con Gran Canaria no podría operar, especialmente en condiciones climatológicas adversas.

Los pilotos aseguran que la seguridad del aeropuerto no se verá comprometida con la obra. Profesionales que trabajan diariamente en Santiago del Monte no lo tienen tan claro, sobre todo, teniendo en cuenta que más de la mitad del año la pista asturiana se ve sometida a condiciones de lluvia, viento y niebla.

Desde el comité de empresa defienden que la solución idónea sería rellenar la vaguada actual, lo que permitiría incrementar la longitud de pista en 200 metros, tal y como prevé el plan director del aeropuerto.

Los sindicatos temen que la obra oculte las intenciones del gobierno de dejar la gestión del aeropuerto en manos privadas.

El aeropuerto de Asturias, dicen, podría venderse en un lote que incluiría también a las terminales de Barcelona, Gran Canaria, Sevilla, Menorca y Lanzarote.