Fuente: RTPA, 30 de septiembre. 2013 20:56

Empresarios del sector del juego reclaman celeridad en la tramitación de la ley

Casino de Gijón

El casino de Asturias asegura que su facturación ha caído un 70% desde que abrió en el año 2006, y en los últimos cuatro años han desaparecido el 52% de los salones de juego que había en la región y se han dado de baja más de un millar de máquinas recreativas.

Ante esta situación, los empresarios reclaman celeridad al Parlamento para que apruebe cuanto antes la nueva Ley del Juego asegurando que están en peligro los puestos de trabajo.

Los empresarios reclaman un significativa reducción de los impuestos para que sus negocios sean viables y recuerdan al Principado que Asturias está entre las cinco comunidades con más carga impositiva.

Durante las comparecencias en la Junta, los clubes de fútbol, la asociación de mayores del Principado y la de Amas de Casa han reivindicado que se permita seguir manteniendo las loterías familiares, algo a lo que se oponen los empresarios.

Las loterías de los clubes de fútbol han sido cuestionadas esta mañana por la asociación de ludópatas rehabilitados que ponen el acento en el perjuicio que puede suponer para los menores.

Sobre este aspecto, el de la prevención de los menores y los clubes de fútbol, también ha hecho hincapié el Consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, quien ha subrayado que solo quedará fuera de la ley aquellas actividades de juego relacionadas con el ocio de carácter local o familiar.

Sobre este aspecto, el de la prevención de los menores y los clubes de fútbol, también ha hecho hincapié el Consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, quien ha subrayado que solo quedará fuera de la ley aquellas actividades de juego relacionadas con el ocio de carácter local o familiar.

El Consejero ha presentado hoy el proyecto de ley del Juego en el Parlamento que, asegura, dedica un título específico a abordar los aspectos tributarios.

Guillermo Martínez reconoce que ha habido una reducción de empresas del juego en Asturias, lo que ha llevado a pérdida de puestos de trabajo y también a reducción de ingresos en el Principado.

El Gobierno regional recaudó el pasado año 35 millones de euros en impuestos relacionados con el juego.