Pulgar asegura que hubo "intencionalidad" en la adjudicación del geriátrico

Pulgar sostiene que se elaboró un baremo a la carta

 El presidente del Montepío de la Minería, Juan José González Pulgar, ha asegurado hoy que la adjudicación de las obras del geriátrico de Felechosa a la empresa Alcedo de los Caballeros se llevó a cabo de forma legal, pero que en su fórmula de tramitación se aprecia "una cierta intencionalidad".

Para González Pulgar, los anteriores responsables de la mutualidad minera elaboraron "un baremo a la carta" que posibilitó que las obras se adjudicaran a la compañía que presentó la oferta económica más elevada de la cinco que optaron al concurso.

Así, ha recordado que la mayor puntuación no se otorgaba al diseño del edificio central del complejo destinado a ser una residencia de mayores, "que era lo prioritario", sino al desarrollo del centro de hidroterapia no incluido inicialmente en el proyecto.

Durante su comparecencia ante la comisión de investigación sobre la fortuna oculta del ex secretario general del SOMA UGT José Ángel Fernández Villa, Pulgar ha defendido, no obstante, la idoneidad del proyecto del geriátrico de Felechosa y ha lamentado que al Montepío se le haya otorgado el papel de chivo expiatorio de este caso.

A su juicio, el proyecto, subvencionado con 31 millones de euros con cargo a los fondos mineros, se ajustaba "como un guante" a los objetivos de este programa dado que tenía una función social y generaba además actividad económica en las cuencas.

Asimismo, ha incidido en que la ejecución de la obra estuvo controlada de forma permanente por el Instituto del Carbón que firmó y autorizó veintinueve de las treinta certificaciones enviadas por el Montepío y que el Ministerio de Industria sigue sin aclarar los motivos del impago de los últimos 3,3 millones que les corresponde percibir por la construcción de geriátrico.

Para Pulgar, presidente del Montepío desde junio de 2014 cuando relevó a Postigo -acogido al igual que Villa a la amnistía fiscal de 2012-, "las cuentas" del organismo que dirige "están claras" por lo que ha lamentado que ambos desaprovecharan la oportunidad "única" de explicar el origen del dinero que ambos regularizaron.

"No tengo ningún indicio ni conocimiento (sobre el origen de la fortuna de Fernández Villa o de Postigo) y si tuviese esos datos se los hubiese dado a la Fiscalía Anticorrupción", ha señalado.

Además ha subrayado que la mutualidad es la más interesada en que la situación de ambos se aclare dado que el Montepío es víctima del "silencio cómplice" de Postigo y Villa, una actitud que ahonda en su "profunda" y "desencanto" por la actuación de una persona a la que admiró y a la que no reconoce en sus acciones.

"Uno se escondía tras las barbas de su abogado y otro tras un informe médico con profundo olor a naftalina", ha subrayado en alusión a la negativa de Postigo a responder a las preguntas de la comisión y la de Fernández Villa a comparecer.

González Pulgar ha pedido "respeto y no insidias" para una entidad sin ánimo de lucro y con doce mil mutualistas como es el Montepío, que da empleo a 200 personas, tiene un patrimonio neto de 47 millones y atraviesa una "preocupante" situación económica.

Así, ha atribuido a la gestión realizada en el Montepío desde 2006 hasta 2014, un periodo en el que se produjo un incremento "espectacular" del endeudamiento que pasó de 6,1 a 17,03 millones al financiar un plan de inversiones elaborado "sin valorar las necesidades reales y sin estudios económicos" en medio de una paulatina reducción de mutualistas que pasaron de 16.000 a 12.000.