Una técnica en el HUCA recupera voces dañadas con cirugía ambulatoria

Utiliza la misma sustancia que permite alisar arrugas

Recuperar voces seriamente dañadas por afecciones en las cuerdas vocales es lo que hace una técnica que se realiza en el HUCA y que es muy similar a las inyecciones para rellenar las arrugas. 

Se trata de una cirugía ambulatoria, con anestesia general, que dura escasos 10 minutos para ser decisiva. 

Con el microscopio localizan el surcus, una hendidura que repliega la cuerda, no dejándola vibrar. Para que recupere su forma la rellenan con un compuesto de nombre hidroxiapatita, el mismo que usan los cirujanos plásticos para recobrar tersuras. La colman hasta darle el volumen que le permite de nuevo trepidar.

Con 29 años a Vanesa Muñiz, maestra infantil, se le diagnosticó un surcus, una malformación congénita en las cuerdas vocales que, hasta hace poco, pasaba desapercibida para los otorrinos. Tras operarse, dos días a la semana, Vanesa trabaja ahora su fonación con una logopeda.

Una docena de pacientes han sido intervenidos en el último año, aunque estiman que al año realizarán una veintena de estas intervenciones, que para que sean un éxito es imprescindible la rehabilitación postperatoria. 

Mañana es el Día de la Voz, una herramienta imprescindible en muchos trabajos como el de profesores o periodistas y que pocas veces se cuida como se debe.