Fuente: RTPA, 12 de agosto. 2010 15:19

Ratones recuperan tejido muscular y capilares con células madre uterinas

Investigadora del Hospital de Jove de Gijón

Investigadores del Hospital de Jove de Gijón han logrado confirmar la capacidad regenerativa de las células madre uterinas con un experimento en el que ratones han recuperado tejido muscular dañado y capilares sanguíneos con este tratamiento.

El equipo de investigación había logrado identificar un nuevo tipo de célula madre uterina, cuya reproducción en laboratorio es mas rápida y en mayor cantidad que las conocidas hasta ahora, y en una segunda fase se han experimentado inoculándoselas a cobayas con daños musculares de hasta el 60 por ciento.

El resultado del experimento "es sumamente alentador" ya que los animales "no solo recuperaron el tejido muscular perdido sino también los vasos sanguíneos necesarios", algo totalmente nuevo en la investigación biogenética, según ha asegurado hoy en rueda de prensa el catedrático de la Facultad de Medicina de la Universidad de Ginebra (Suiza), Roberto Montesano.

El profesor, de origen italiano, ha sido invitado por el equipo que dirige Francisco Vizoso en el Hospital de Jove para observar los avances de la investigación con células madres y se ha manifestado "totalmente sorprendido y esperanzado" por el hallazgo.

Las células madres son extraídas del cuello del útero de mujeres fértiles e inoculadas en la zona dañada, en otra mas alejada y en el torrente sanguíneo de ratones a los que se les había sometido previamente a daños musculares de importancia, que en algunos casos significaban la perdida de hasta el 60 por ciento de la masa de un miembro.

En sólo tres semanas, las cobayas recuperaron el 10 por ciento de la masa muscular perdida y los vasos sanguíneos, lo que permite alimentar esperanzas fundadas sobre la posibilidad de que el tratamiento sea útil en la cura de enfermedades degenerativas, según ha informado la bioquímica del equipo investigador Noemí Peiró.

Montesano ha destacado además que se ha comprobado que este tipo de células madre uterinas provocan en el receptor sustancias antiinflamatorias, lo que posibilitaría su uso además en el tratamiento de enfermedades crónicas del intestino.

El catedrático ha abogado por continuar desarrollando con la mayor rapidez la fase de investigación en animales para dar el salto a la experimentación con humanos una vez que se compruebe la seguridad porque, en su opinión, "puede producir un gran avance en la medicina".