Especialistas estiman que unos 2.000 asturianos padecen la enfermedad de Meniere
Se reúnen en Oviedo para hablar de los últimos avances terapéuticos
Salir sola de casa era, hasta hace nueve meses, impensable para Bene. Las últimas cuatro décadas de sus 75 años han estado marcadas por la enfermedad de Meniere, una patología del oído medio que le provocaba brotes de vértigo incontrolables y que le sobrevenían sin aviso.
Esos episodios la atenazaron hasta deprimirla a pesar de medicaciones varias. Hace un año Bene se sometió a una intervención ambulatoria en el que la inyectaron antibióticos en el tímpano. Tardó tres meses en recuperar el equilibrio y su vida.
Dos de cada 10 pacientes que pasan por consulta logran controlar esos brotes con inyecciones intratimpánicas que pueden ser también con corticoides. Son los casos más rebeldes.
Todo ocurre en el oído medio, donde se aloja el sistema de equilibrio. Es el vestíbulo desde donde se distribuye al cerebro todos los movimientos de nuestra cabeza. Se desconoce porqué en estos pacientes no funciona.
Pocos saben que esa es una dolencia que padece desde hace 30 años el jurista Bernardo Fernandez. Atribuía sus crisis al estrés y los viajes. Su Meniere, con el que convive, es de manual. Siente un zumbido persistente y plenitud en su oído derecho, al que acompañan náuseas antes de desembocar en una crisis de vértigo.
Esos brotes recurrentes le provocaban pérdida de audición, pero no las ganas de trabajar. Desde hace tres años lo tiene controlado con inyecciones y antihistamínicos. Tres años de felicidad, dice, en los que ha recuperado incluso el placer de beber té.
Varios expertos europeos se han reunido esta tarde y mañana para hablar de los últimos avances terapéuticos y de diagnóstico en Oviedo.