Simbolismo y emotividad en honor a la Virgen de la Guía
La fiesta está declarada de interés turístico nacional
Los ritos tradicionales y el fervor religioso se aúnan en la celebración en honor a la Virgen de la Guía, una fiesta de Interés Turístico Nacional.
Después de haber pasado la noche en la basílica llega el momento de subir de nuevo a la imagen a su capilla. Un rito que se repite ininterrumpidamente desde 1929 en un recorrido salpicado de color y momentos emotivos.
El colofón a esta celebración lo ponen los mozos con una serie de bailes típicos, entre ellos El pericote.