El PP cuestiona la voluntad del gobierno para negociar los presupuestos regionales

Andrés Ruiz afea a Barbón su incapacidad para llegar a grandes acuerdos

El Partido Popular tiene claro que el presidente del Principado, Adrián Barbón, no tiene intención de negociar con esta formación los presupuestos autonómicos del próximo año y que ha optado por las minorías en lugar de apuntar las cuentas regionales "para la gran mayoría social de Asturias".

Según el portavoz de Hacienda del PP en la Junta General del Principado, Andrés Ruiz, así se vio cuando el jefe del Ejecutivo autonómico pidió al presidente de los populares asturianos, Álvaro Queipo, que se abstuviese en la votación de los presupuestos, lo que supone una "renuncia a toda ambición negociadora".

"Barbón no tiene intención alguna de entablar negociación alguna con el PP", ha subrayado el diputado popular en una rueda de prensa en la que ha asegurado que "la soberbia de Barbón hace imposible los grandes acuerdos y deja a su Gobierno cada vez más pequeño y dependiente de las minorías que lo sustentan".

Ruiz, que ha aclarado que el PP seguirá acudiendo a las reuniones a las que les convoquen "por lealtad institucional", ha criticado que desde el Gobierno no les hayan facilitado ninguno de los datos que había solicitado sobre recaudación prevista de impuestos o del gasto corriente y que se haya limitado a trasladar su negativa a reformar ningún impuesto.

Tampoco ha respondido "con claridad" a los tres ejes que el PP trasladó al Gobierno para abordar la negociación presupuestaria: una fiscalidad que alivie la carga tributaria, una administración más eficiente y más eficaz y el blindaje de los servicios públicos fundamentales.

Para el portavoz de Hacienda del PP, el Gobierno podría asumir en parte estos postulados, pero parece que a Barbón y a su coalición de Gobierno le compense pactar unas cuentas con los populares.

Así las cosas, los populares temen que los presupuestos del Gobierno para 2025 en Asturias “van a ser idénticos" a los anteriores con lo que "no van a dar respuesta a los problemas de los asturianos” y "persistirán en el error" ya que no servirán para reactivar la economía, aligerar la carga burocrática o liberar recursos para la inversión productiva.