La propuesta para la Fábrica de Gas de Oviedo apuesta por una dirección externalizada

Se ofrece como documento abierto a la ciudadanía que podrá votar por Internet

La propuesta sobre el futuro de la Fábrica de Gas de Oviedo como nuevo centro cultural plantea impulsar un modelo de cooperación público-privada con una dirección externalizada que se ocupe de la gestión cotidiana y en constante interacción con los agentes que intervienen en el proyecto.

La propuesta-marco ha sido elaborada como conclusión de las jornadas de participación ciudadana y políticas culturales celebradas la pasada semana y se ofrece como un documento abierto a la ciudadanía que ahora podrá trasladar sus planteamientos a través de la dirección de correo electrónico ventanillacultural@oviedo.es.

El documento advierte de que el modelo de gestión y la filosofía que guía la Fábrica son dos cuestiones que deben estar en consonancia y considera necesario profundizar las relaciones entre la iniciativa pública y la iniciativa privada, que pueden encontrar en La Fábrica la oportunidad para desarrollar ciertos proyectos.

Asimismo, incide en que, sea cual sea la definición última de la fórmula de gestión (co-gestión, externalización, gestión ciudadana, etc.) "es evidente que la relación con la ciudadanía es clave".

Así, plantea que la dirección externalizada por la que se inclina forme parte de un consejo general o mesa de seguimiento que se reúna periódicamente para supervisar la ejecución del programa y el presupuesto y proponer nuevas iniciativas.

De este consejo formarían parte el Ayuntamiento de Oviedo, los sectores y colectivos artísticos residentes y no residentes, la ciudadanía, las empresas privadas que patrocinen una iniciativa, todo el proyecto o que colaboren en diferentes maneras así como portavoces del funcionamiento cotidiano del espacio.

La propuesta plantea establecer un contrato programa con las administraciones públicas que garantice la continuidad a medio y largo plazo y que la dirección se encargue de gestionar una convocatoria pública para acoger las propuestas artísticas y distribuirlas en programas semestrales o anuales.

Según los autores del programa, una de las prioridades de la Fábrica de Gas es que su material artístico sea complementario a la oferta cultural ya existente y suplir los huecos de creación y experimentación de los que la ciudad carece y dar cabida a los formatos, géneros y propuestas que no están contemplados en las iniciativas municipales o privadas ya existentes.

La antigua instalación fabril, con una superficie ocupado de 6.496 metros cuadrados y libre de 5.406, toma como referencia iniciativas similares en otros países europeos que han aprovechado antiguos recintos industriales rehabilitados para dar cabida a la creación contemporánea acogiendo diferentes disciplinas y usando la fábrica como solución a los problemas de espacios además de aportar un valor social al ligarse a la memoria histórica de la ciudad.

La configuración de un barrio artístico integrado al resto de la ciudad que permita revitalizar la cultura urbana requeriría contar como mínimo, y según dotación presupuestaria y fases de implementación, con laboratorios, residencias y talleres de formación y de producción además de espacios de exhibición.

En una segunda fase, el documento plantea disponer de un espacio expositivo con una programación regular, una sala/escenario para presentaciones, viviendas para residentes externos y el recinto fabril exterior como escenario natural o plató para diferentes manifestaciones artísticas.