A simple vista es un edificio más del centro de Oviedo / Uviéu, pero su peculiaridad está en la pintura, tanto del exterior, como de su interior.
Una pintura, dicen sus fabricantes, capaz de reducir la contaminación de la calle, la equivalente a la que producen 73 coches al día.
Los propietarios de este inmueble ovetense expresionista de 1935, diseñado por el famoso arquitecto Vidal Saiz Heres, venden ahora cuatro pisos de lujo pero convertidos en buque insignia de su proyecto, Airlite, un tipo de pintura que se comercializa desde hace tres años en España y que aseguran, purifica el aire y mejora la calidad de vida en su interior.
Este tipo de pintura cuesta unos 13 euros el metro cuadrado y tiene que ser usada solo por pintores especializados. Además no vale cualquier color, solo los claros son 100 por 100 efectivos.
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