Después de una laboriosa poda, María José y su marido afrontan la temporada de cosecha con optimismo ante el buen cuaje del arándano pero con preocupación por los vaivenes térmicos. Ello les ha llevado a desplegar algo antes lo habitual los plásticos para proteger al fruto de posibles inclemencias.
El viento de los últimos días está ralentizando su labor y el crecimiento de algunas partes de la finca.
En total, 4.700 plantas y siete variedades, cada una de ellas con un ritmo diferente, de las que María José se muestra satisfecha con su evolución y los nuevos brotes.
Si el tiempo acompaña y todo va según lo previsto, confían en recoger alrededor de 9.000 kilos de arándanos esta próxima campaña, que arrancaría en el mes de junio.
© 2024 Radiotelevisión del Principado de Asturias | Todos los derechos reservados
Publicidad | Aviso Legal | Política de privacidad | Política de cookies | RSS | Sobre RTPA | Entidad adherida a AUTOCONTROL