La UCO defiende ante la jueza que investiga los cursos de formación de UGT que los trabajadores del sindicato, cuyos sueldos se pagaban con las subvenciones, negaron en los interrogatorios haber realizado labores para los cursos.
En la tercera sesión del juicio ha declarado también la exdirectora del IFES, Ana Gomis, que fue la primera persona en denunciar el presunto fraude ante la UCO y la Fiscalía.
Gomis ha asegurado ante la jueza que el sindicato se quedaba sistemáticamente con el 20% de las subvenciones que recibía para formación. Lo hacía bajo la denominación de gastos asociados, un concepto que le servía, dice, para sufragar la totalidad o parte del sueldo de algunos trabajadores del sindicato.
Gomis, que presentó su denuncia después de ser despedida, recalca que no actúa por hostilidad y que si no denunció antes, fue por miedo a represalias. Tanto ella como otros extrabajadores han denunciado presiones del sindicato.
Como testigo también ha declarado la responsable de los servicios jurídicos que, ante la magistrada, ha afirmado que también en su sección había personal contratado con cargo a la subvención.
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