El hombre de 56 años, octavo caso de coronavirus detectado en Asturias, se encuentra en buen estado y en aislamiento domiciliario y se trata de una persona que estaba en seguimiento por haber sido un "contacto casual" con el primer afectado por la enfermedad en la comunidad, ha informado la Consejería de Salud.
Este departamento confirmó ayer por la noche este nuevo positivo, tras los resultados obtenidos por el Laboratorio de Virología del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), que lleva realizadas 171 pruebas por sospecha de COVID-19.
Este último caso manifestó síntomas leves y, al estar siendo vigilado como un contacto de bajo riesgo de un caso anterior, se activó la recogida de muestras que dieron positivo.
Desde entonces se encuentra en aislamiento en su domicilio y con buen estado.
Respecto a la situación clínica de los afectados, siete de los ocho casos presentan síntomas leves de la enfermedad y todos se encuentran en aislamiento y evolucionan favorablemente.
En el caso del primer positivo, el varón de 70 años, permanece estable dentro de la gravedad como en días anteriores.
Las autoridades sanitarias recuerdan que las personas que han viajado a alguna de las zonas consideradas de riesgo (China, Corea del Sur, Japón, Singapur, Irán y las regiones italianas de Lombardía, Veneto, Emilia-Romagna y Piamonte) y que presenten los síntomas de tos, fiebre o dificultad respiratoria es necesario que se pongan en contacto con el 112 donde les darán la información adecuada sobre las actuaciones a realizar.
El 112 atendió ayer 206 llamadas relacionadas con el nuevo coronavirus.
Las autoridades sanitarias insisten en que la medida más eficaz para prevenir la transmisión de los virus respiratorios, entre ellos el nuevo coronavirus, es el lavado frecuente de manos con agua y jabón, así como utilizar la flexura del codo o pañuelos desechables de un solo uso para toser o estornudar.
Mientras tanto, en el Sindicato Médico de Asturias están preocupados por la evolución del coronavirus. Reconocen que el Sespa está provisionando del material necesario y está empezando a formar al personal sanitario para saber cómo actuar, aunque lamentan el retraso.
La formación se centra ahora mismo en los servicios de urgencias, el Samu y atención primaria.
El colectivo médico espera que la previsión y la provisión sigan siendo las adecuadas a largo plazo. Recuerdan que los profesionales sanitarios son la primera barrera de contención de la enfermedad y necesitan estar protegidos.
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