El presidente del Principado ofrece un pacto contra la corrupción implacable

Obligará a dimitir a todo alto cargo con apertura de juicio oral

El presidente del Principado, Javier Fernández, ha cerrado hoy su intervención en la primera jornada del debate sobre el estado de la región ofreciendo a los grupos un pacto contra la corrupción que obligue a dimitir a todo alto cargo para el que un juzgado determine la apertura de juicio oral.

Fernández ha hecho esta propuesta, que ha definido como su compromiso "más firme", tras mencionar en su discurso la fortuna oculta "no desmentida" del ex secretario general del SOMA-UGT, José Ángel Fernández Villa, "supuestamente acogido a la amnistía fiscal" y el uso abusivo e injustificado de tarjetas de crédito en Bankia.

Tras definirse como una persona normal, con familia y amigos, y admitir que puede resultar más o menos simpático o mejor o peor presidente, ha garantizado sentirse con coraje, fuerza y autoridad moral suficiente para "mirar a los ojos a los asturianos" y garantizar que será implacable con la corrupción de desconocidos como y del compañero "más próximo y del que menos se lo espera".

El jefe del Ejecutivo ha señalado que su patrimonio personal de honradez es también el que debe "a los sindicalistas, a los mineros, a los trabajadores y a todos los asturianos" antes de concluir: "Ni les debo fallar ni les voy a fallar, se lo aseguro".

"No basta con los cambios legales ni con hacer coros de repudio. El corrupto no es sólo quien incumple la ley para lucrarse; también el que quiebra los principios que proclama al tiempo que esquiva las normas y se embosca en algún recoveco legal que le permite enriquecerse o atesorar privilegios", ha añadido.

Fernández ha defendido que su partido siempre encarnó la defensa de valores como la justicia, la fraternidad y la honradez aunque nadie tenga "el monopolio de la decencia", pero ha subrayado que la corrupción o el comportamiento "indeseable" no se ataja sólo a golpe de ley sino que necesita de ejemplaridad en la conducta personal.

Además, ha señalado que, como presidente, asume ser quien tiene mayor responsabilidad contra la corrupción y que la ejercerá sin "titubeos" por lo que ha renovado su compromiso de no mantener, ni en su gobierno ni en el partido que dirige, a ningún responsable cargo que tenga un juicio oral abierto.

Así, ha pedido al resto de formaciones políticos que todos pongan el listón "a la misma altura" y suscriban un pacto por el que, tanto en el ámbito parlamentario como en el de sus respectivos partidos, se comprometan a destituir de inmediato a los responsables que se vean en esta situación.

"No les pido que acepten sin más mis promesas. Les ruego que tomen nota de mis decisiones. De las más recientes y de las anteriores y busquen en ellas tolerancia, comprensión con la corrupción. No la encontrarán", ha proclamado antes de cerrar su discurso pidiendo que todos los grupos se aúnen para dar "ejemplo" a los asturianos en la lucha contra la corrupción. 

Presupuestos

Asimismo, Javier Fernández ha hecho un llamamiento a todos los grupos de la Junta General del Principado para que hagan un esfuerzo y eviten que por segundo año consecutivo haya una prórroga presupuestaria mientras los asturianos siguen sufriendo la recesión económica.

Fernández ha asegurado que la búsqueda de acuerdos es una obligación aritmética, pero también un deber político y una responsabilidad que compete principalmente al Gobierno, pero también a todos los diputados.

En su opinión, en vísperas de una negociación presupuestaria, no hay que dar la espalda a los asturianos ni demostrar que los grupos parlamentarios son incapaces de alcanzar un pacto para arrimar hasta el último euro contra la crisis.

Para Fernández, en un momento en el que se habla mucho de la vieja y la nueva política y de la necesidad de alcanzar una regeneración política, si los grupos son incapaces de alcanzar un acuerdo presupuestario "para vengar una derrota parlamentaria", se estaría ante un ejercicio de "política inservible".

Ha anunciado que abrirá muy pronto conversaciones con todos los grupos y su gobierno acudirá "abierto a negociar, a modificar, a transigir" porque, según ha afirmado, quiere contar con la oposición para afrontar la crisis y que la región cuente con presupuestos.

En este punto, el presidente ha recordado que hace un año los socialistas se negaron a respaldar una reforma electoral porque carecía de suficiente consenso, lo que propició que UPyD rompiese su pacto con el PSOE y que IU no diese su apoyo a las cuentas regionales cuando había más de cien mil parados y se reclamaba su aprobación desde múltiples ámbitos de la sociedad.

Con la prórroga presupuestaria, el Gobierno tuvo que aprobar tres proyectos de ley para obtener un crédito de 343 millones de euros, leyes que aprobó con el apoyo del PP, al que hoy ha reconocido haber estado a la "altura de las circunstancias".