Javier Fernández reclama unión política para revertir la decisión de cerrar Alcoa

El presidente del Principado atribuye la falta de acuerdos a un Podemos "desnortado"

El presidente del Principado, Javier Fernández, ha pedido hoy acuerdos con la oposición, pese a la cercanía de las elecciones, para cerrar con un pacto presupuestario una legislatura "más yerma que fértil" marcada por un "desnortado" Podemos que veía en el desgaste del Gobierno su mejor aval para crecer.

Fernández ha hecho este emplazamiento al diálogo en el discurso de 24 páginas y pronunciado en 48 minutos con el que ha abierto el que será el último debate de la región en el que participe, dado que en mayo dejará la actividad política tras siete años de mandato.

Tras abrir su intervención con un recuerdo para los trabajadores de Alcoa y reclamar unidad institucional y política para evitar el cierre de la factoría de Avilés, el jefe del Ejecutivo ha recordado que en tres años sólo se ha aprobado un presupuesto, con el apoyo de PP y Ciudadanos, y que la falta de acuerdo del resto no se debió ni a su gabinete, ni a su partido, ni a IU ni a sindicatos o patronal.

Así, ha incidido, año tras año los llamamientos al consenso, las negociaciones y las cesiones tropezaron "con la negativa de Podemos" que optó por una estrategia "propia de quien elige ser antes un adversario electoral que un aliado político para atender las necesidades de los asturianos".

Pese a estas críticas, que han llevado al portavoz morado, Enrique López, a afirmar que Fernández "odia a Podemos", el jefe del Ejecutivo ha pedido a esta formación que, como ha hecho a nivel nacional, asuma renuncias en pro del consenso e intente aprovechar lo que queda de legislatura en defensa de los intereses de Asturias.

"La legislatura no está acabada y mi obligación -y la suya- es aprovecharla, sacarle partido hasta el último minuto", ha subrayado.

A su juicio, cualquiera que haya seguido el diálogo entre Podemos y el Gobierno central habrá comprobado que hubo episodios de tensión, aproximaciones y alejamientos hasta el acuerdo final, "algo habitual en un proceso de negociación" y que ocurre siempre que se negocia "con voluntad de acuerdo y disposición al entendimiento".

Al margen de la cuestión presupuestaria, la intervención de Fernández ha estado marcada por la situación de Alcoa y del conjunto de la industria asturiana ante los planes de transición energética del Gobierno central que no deben propiciar, a su juicio, "una industria más limpia" a costa de "laminar" la existente, sino que ese objetivo debe lograrse a partir de "mejorar" la actual.

Tras subrayar que la responsabilidad sobre Alcoa "recae de pleno" sobre la dirección de la empresa, el presidente asturiano ha advertido de que la política energética es siempre una cuestión de Estado y en un mercado global las empresas eligen las localizaciones más favorables para sus intereses "y para aquellas que consumen mucha electricidad el coste de la energía es un factor decisivo".

Así, en una economía como la asturiana en la que el peso de la industria se sitúa en el 20,4 por ciento del PIB pese a las reconversiones sufridas, Asturias debe estar atenta a la transición energética que se plantea y no sólo en defensa de la minería.

La descarbonización "pactada, progresiva y no apresurada" que reclama, ha apuntado, busca defender empleo en las térmicas y el transporte, mantener el tráfico de graneles de El Musel y evitar un aumento del precio de la energía que arriesgue la competitividad de la industria.

En su discurso, Fernández se ha referido también a la reforma estatutaria promovida por Podemos e IU para incluir la oficialidad del asturiano y para la que "no es el momento adecuado" al ser "una tarea seria que requiere más ingredientes que el mero oportunismo".

También ha reiterado su petición de que se reforme el sistema de financiación autonómica antes de las elecciones generales dado que que no intuye "tiempos mejores" para ello y subrayar que, "llegado el caso", habrá que hacerlo "participen o no" los independentistas.

Tras comprometerse a llevar "más allá" en cuanto a concreción y detalle el acuerdo a nivel nacional entre el PSOE y Podemos para impulsar las escuelas infantiles de cero a tres años, el jefe del Ejecutivo ha lamentado, en materia de infraestructuras, que la alianza promovida en Asturias no tenga más respaldo político "por una mezcla de oportunismo, miedo a pactar y subordinación política"

En este ámbito ha mostrado su confianza "sincera" en que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cumpla su compromiso de culminar proyectos las obras de la Variante de Payares en 2020 y que se abra con tráfico mixto de mercancías y pasajeros.

De ese compromiso forman parte también la mejora de las cercanías ferroviarias, el plan de vías de Gijón y recuperar la Autopista del Mar, ha apuntado tras considerar "lógicas" las críticas de usuarios y oposición por la falta de enlaces aéreos internacionales.