En una pequeña caja, tapada en un altillo, allí encontró la UCO los 28.000 euros en efectivo que Fernández Villa guardaba en billetes de 50 euros.
Él es el único investigado al que se le ha encontrado dinero en los registros realizados en la operación Hulla. Fernández Villa afirmó entender los hechos imputados, según consta en el acta de entrada y registro, hasta que llegó su defensa que insistió en que su cliente no está en condiciones de comprender.
Entre los registros realizados destaca también el de la vivienda que Juan Antonio Fernández, el constructor del geriátrico, posee en Mayorga, en Valladolid. Una finca de lujo, según la investigación, en la que contaba con tres caballos y un lobo.
La investigación cifra en cerca de un 1.300.000 euros el dinero que José Angel Fernández Villa pudo obtener de forma ilícita. Una cuantía que en el caso de José Antonio Postigo ascendería a 900.000 euros. Aquí suman tanto la regularización fiscal, como las compras de inmuebles o vehículos que, en el caso del expresidente del Montepío, fueron numerosas y la mayoría, pagadas en metálico.
Anticorrupción señala en su querella que, en ambos casos, es significativo que la cuenta que utilizaban para gastos corrientes estuviera sin movmientos durante años.
Sumamente relevante es para la Fiscalía que, en el caso de Postigo, los gastos de esa cuenta disminuyeran de forma notable desde el momento en el que asume la presidencia del Montepío, lo que les lleva a pensar que tenía otras vías de ingresos.
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