La Universidad y el CSIC impulsan un proyecto educativo contra los incendios forestales

La iniciativa busca "entender la problemática sobre el terreno y generar soluciones colectivas"

La Universidad de Oviedo y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) colaboran en un proyecto educativo para incrementar la sensibilidad sobre los incendios forestales en las áreas rurales afectadas por los fuegos.

La iniciativa 'Plantando cara al fuego' pone en contacto a los estudiantes de la universidad con miembros de las comunidades afectadas y otros agentes sociales vinculados al fenómeno de los incendios.

El programa, que cuenta con financiación del Fondo Español para la Ciencia y la Tecnología (Fecyt) y en él participan 11 comunidades, busca "entender la problemática sobre el terreno y generar soluciones colectivas que atiendan las necesidades reales de este complejo problema".

Según ha informado la institución académica, pese a los avances científicos de los últimos años en aspectos como la prevención, la detección o la restauración de espacios quemados, su implementación práctica es "limitada debido a la falta de transferencia de conocimientos y la implicación ciudadana".

Para hacer frente a este desafío, el proyecto pone en contacto a centros educativos y de investigación con administraciones públicas, propietarios, entidades privadas y ONGs en once comunidades autónomas, donde se llevan a cabo actividades de prevención, restauración, formación y divulgación sobre incendios.

Algunas de las actividades enmarcadas en el proyecto se han desarrollado ya durante esta primavera, como en zonas del concejo de Sobrescobio afectadas por los últimos incendios forestales, donde ha tenido lugar la acción "Sembrando esperanza".

Estudiantes del Grado en Ingeniería Forestal y del Medio Natural y del Máster en Geotecnología y Desarrollo de Proyectos SIG del Campus de Mieres explicaron a 38 escolares de Primaria la importancia de los bosques, los impactos de los incendios, los usos correctos del fuego y la restauración de zonas quemadas.

Los participantes debatieron sobre el terreno los diversos efectos que los incendios pueden tener sobre los ecosistemas, sus principales causas, y cómo se pueden gestionar las zonas quemadas.

La actividad culminó con una plantación de especies frondosas (robles, rebollos, castaños y abedules) por parte de los estudiantes.

La edición actual del proyecto culminará este verano con la celebración de un taller internacional en Santiago de Compostela el 12, 13 y 14 de julio sobre innovación educativa para aprender a convivir con los incendios forestales.

El lema responde a la necesidad de generar estrategias estables que ayuden a prevenir los incendios y reducir sus impactos.