El SOMA-FITAG-UGT ha asegurado hoy que, una vez analizada la contabilidad correspondiente al periodo 2008-2014, los 1,4 millones de euros que fueron regularizados en la amnistía fiscal por su anterior secretario general, José Ángel Fernández Villa, "no han salido del sindicato".
La organización sindical ha informado hoy del resultado de sendos informes encargados a la empresa C.B. Auditores y Asesores sobre la contabilidad oficial del SOMA-UGT y de la Fundación Instituto para la Formación, la Investigación, la Documentación y los Estudios Sociales (Infide), que fueron presididos por Fernández Villa.
El sindicato reconoce que, "a la vista de los informes emitidos", se puede afirmar que "no existió un exhaustivo control efectivo sobre las transacciones de las citadas organizaciones", puesto que "la contabilidad presenta un importante número de errores tanto desde el punto de vista técnico contable como de falta de documentación justificativa del gasto".
No obstante, asegura que el resultado de las auditorías también permite concluir que los fondos regularizados por Fernández Villa, que tras dejar la secretaría general presidía ambos organismos (SOMA-UGT e Infide), "no han salido de los mismos, ni han salido del sindicato", a la vez que precisa que el exdirigente "no tenía asignado salario alguno en cualquiera de las dos organizaciones".
El SOMA-FITAG-UGT considera que los informes también han dejado "meridianamente claro que la naturaleza de determinadas disposiciones o gastos, en los que presuntamente incurrió el anterior presidente de ambas organizaciones, no es adecuada al objeto social de las organizaciones".
Tras comprobar el "claro menoscabo del patrimonio" del sindicato, el SOMA-FITAG-UGT ha contratado los servicios de un despacho de abogados para ejercer las acciones necesarias para "depurar" responsabilidades, "solicitar la íntegra devolución de los importes objeto de la controversia", y "preservar la imagen y honorabilidad" de la organización sindical.
Al margen del contenido de estos informes, el SOMA-FITAG-UGT ha informado de su intención de reclamar las cantidades que Fernández Villa cobró entre 1989 y 2001 mediante talones nominativos de Hunosa por dietas de asistencia destinadas a los miembros del sindicato que acudían a las reuniones del comité intercentros de la empresa y que ascendían a unos 243.000 euros.
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