Los expertos creen que la escasez de los osos hace importante cada uno de ellos, y mucho más si son hembras. De ahí la importancia de casos aislados como el de la osezna encontrada este jueves en Cangas del Narcea, o el caso de Villarina, hace unos años.
En la cordillera cantábrica hay censados unos 200 ejemplares de oso pardo. Es una especie en peligro de extinción y cada individuo es importante, ha destacado Javier Naves, biólogo del CSIC.
Tanto la osezna que se recupera ahora en Sobrescobio como Villarina han concentrado los esfuerzos de organismos e instituciones y los expertos defienden que su recuperación es un paso importante para la conservación de la especie.
La causa del ataque está por determinar, aunque la mayoría de los expertos creen que el hecho de que sea época de celo crea tensiones entre los animales y pudo propiciar el ataque. En los últimos años se han detectado una decena de casos similares en el Principado. Hay expertos que creen que no es el caso de la cría encontrada el jueves, dado que la osezna tenía más de un año.
Para Carlos Nores, vicepresidente de la Fundación Oso Pardo, las "heridas parecen compatibles con un oso, pero evidentemente no parece haber habido un intento de matar al animal sino de quitarlo del medio o algo por el estilo". De confirmarse la hipótesis de Nores, sería el primer caso registrado en Asturias del ataque a una cría de oso sin causa aparente.
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