Las jornadas de las cebollas rellenas cumplen las expectativas en la veintena de restaurantes participantes
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- 0:01Yo rápido.
- 0:03Yo relleno.
- 0:04Pongo los allí despacito.
- 0:05Hala, ya está hecho el tomate.
- 0:07El truco de eso es echar
- 0:09buen ingrediente el bonito.
- 0:11Hablan las cocineras y paladares
- 0:13expertos, las personas que no
- 0:14pierden jornada de cebolletas.
- 0:16Un año más, la veintena de
- 0:18establecimientos participantes
- 0:19firman las reservas completas desde
- 0:21hace semanas.
- 0:22Cada uno calcula elaborar de 600
- 0:23a 3000 cebollas a degustar
- 0:25en el local o para llevar.
- 0:27Cebollas unas mil 500.600
- 0:29cebollas.
- 0:30Y.
- 0:31La verdad es que las reservas
- 0:32llevamos llenos desde bastantes
- 0:33meses porque la primera reserva tuve
- 0:34en agosto y.
- 0:35Y de partir de ahí que pensaba que
- 0:36estaban locos.
- 0:37Ya me llamaron y ya en dos semanas
- 0:39o tres llenamos.
- 0:40Hacemos un circuito por todos los
- 0:41bares.
- 0:43Un año en un sitio, otro en otro y
- 0:44así. Hoy es un plato típico de aquí
- 0:46y está bastante,
- 0:48bastante conseguido.
- 0:50Es un plato que nosotros, por
- 0:52ejemplo, nos encantan.
- 0:53Junto a los callos y las Casa de
- 0:54Reyes, el menú también gana adeptos.
- 0:57Si es la primera vez que vengo aquí,
- 0:58la entrego a comer cebollas.
- 1:00Muy buenas, la verdad no me lo
- 1:01esperaba. Que algo tan simple
- 1:03realmente está delicioso.
- 1:05Y sin duda lo que más se disfruta.
- 1:07Mojar el pan mañana dos kilos.
Las reservas en los restaurantes están completas desde hace semanas
Un año más, la veintena de establecimientos participantes firman las reservas completas desde hace semanas. Cada uno, calcula elaborar de 600 y 3.000 cebolles a degustar en el local o para llevar señalan Andrea García, trabajadora del Café Restaurante Cervantes; Diego Fraile, propietario del Restaurante Di-ferente; y Eufrasio Sánchez, vecino de Langreo.
Junto a los callos y les casadielles, el menú también gana adeptos apunta Miguel Morales, visitante de Canarias.
Y, sin duda, lo que más se disfruta es mojar el pan, asegura María Elena González, vecina de L’Entregu.