El neurólogo sospecha que el estado de Villa es mejor de lo que aparenta
Deja en manos de la juez la decisión última de llamarlo a declarar
El neurólogo que ha estudiado la salud mental de José Ángel Fernández Villa reconoce que el ex líder sindical tiene problemas de memoria y le cuesta mantener la atención, pero puede comprender lo que se le dice y hacerse entender.
El doctor Robles Bayón afirma que durante la evaluación que le realizó "presumiblemente Villa trató de dar a entender que se encuentra en una situación de gran deterioro" contestando erróneamente a algunas preguntas o negándose a responder otras. Además, Fernández Villa puede elaborar mensajes apropiados, aunque con poca fluidez verbal.
Eso le lleva a concluir que el grado de alteración que ha observado "probablemente" es superior al grado de alteración real.
La principal carencia que señala el médico es que tiene notables dificultades para recordar. Esta carencia le afecta especialmente al recuerdo de eventos antiguos, pero también los más recientes e incluso a datos de su autobiografía.
Tras evaluarle en su piso de Oviedo el pasado día 11, por encargo de la jueza que investiga una denuncia del SOMA contra él, el neurólogo ha elaborado un informe de 22 páginas sobre el estado de salud de José Ángel Fernández Villa en el que detalla todas las pruebas que le ralizó y repasa su historial médico.
El neurólogo coteja los datos de Villa con un baremo sobre el deterioro máximo que impediría su testificación ante la Justicia.
De 18 parámetros analizados, en una decena de ellos estaría en los márgenes que permiten su comparecencia judicial.
Según ha podido saber TPA Noticias, el doctor Alfredo Robles Bayón, deja en manos de la jueza la decisión última sobre si le llama o no a declarar, aunque sospecha que su estado es menos malo del que aparenta.