El cáncer como enfermedad laboral
Un cáncer contraído en el puesto de trabajo se desarrolla 10 años después
Un cáncer contraído en el puesto de trabajo se desarrolla, de media, 10 años después de que el afectado haya tenido contacto con la sustancia cancerígena. Son datos que maneja el Instituto Asturiano de Prevención de Riesgos Laborales. Por ello identificar ese momento con la actividad laboral que entonces desarrollaba el trabajador es muy difícil.
Es esencial la investigación y también la labor de los profesionales del Instituto Nacional de la Seguridad Social. En este sentido, los técnicos reconocen que cambiar la calificación de una enfermedad común a profesional no siempre es fácil.
Se ha conseguido con algunos cánceres como los mesotelioma provocados por el amianto, el cromo relacionado con las pinturas y barnices, las maderas en la carpinterías o las amidas en peluquería, aunque su frecuencia es escasa.
Son temas abordados en una jornada sobre cáncer laboral organizada por el Instituto Asturiano de Prevención.