Otilia es la última molinera en activo de Boal

Los turistas visitan su molino, al que todavía con 87 años acude a diario

A sus 87 años, Otilia es uno de esos ejemplos de vida que muchos quisieran para sí mismos. Es la única vecina de Froseira y la última molinera en activo en el concejo de Boal.

Tras emigrar unos años a Caracas, llegó aquí hace más de medio siglo para asentarse junto a su marido. Es raro el día que no visita su molino, el que le dio de comer muchos años. Hace décadas se necesitaba grano para hacer pan.

Otilia se quedó viuda hace 19 años, pero decidió quedarse en Froseira a vivir sola. Hace poco se hizo un pequeño altar cerca del molino para rezar. Lo hace algunas veces, aunque no es demasiado religiosa.

Son muchos los turistas que llegan aquí dada la cercanía con a Cova do Demo. Son los momentos, asegura,  más entretenidos del día.

A esta molinera el aire fresco, la alimentación de toda la vida y el buen humor le han agraciado con una salud, prácticamente de hierro. Pasar con ella unos minutos es simplemente toda una bendición. Le pedimos la receta para llegar así de bien a casi los 90 años, pero parece que no hay ninguna.

En Froseira el tiempo lleva años detenido, no hay duda. Las manecillas las controla con soltura Otilia, una de esas personas llenas de sabiduría que todavía tiene mucho que contar.