Una veintena de empresas asturianas podrían beneficiarse cada año de la nueva ley de startups
Una norma pionera en Europa que ofrece ventajas fiscales a negocios incipientes basados en la innovación
Empresas con no más de cinco años de antigüedad, que ofrecen productos o servicios innovadores, normalmente de base tecnológica. La ley de las conocidas como startups les otorga una categoría que las distingue del resto de empresas. Una norma pionera en Europa de la que podrían beneficiarse alrededor de una veintena de negocios emergentes en Asturias cada año.
Las empresas de Ángel Colao y Rubén Hernández son dos de las aspirantes. Una, combina el análisis de datos y la inteligencia artificial para reducir la carga de trabajo de los sanitarios; la otra, realiza diagnósticos digitales de la piel a través del móvil para diseñar cosméticos personalizados.
La ley favorece la atracción de capital inversor con incentivos fiscales y fomenta el emprendimiento rural. La ley de startups también regula la figura de los nómadas digitales facilitando los visados para el teletrabajo internacional.