Viaje por la memoria de la Fábrica de Loza de San Claudio
La mano de obra tuvo acento de mujer en la fábrica
Hace 10 años echó el cierre la Fábrica de Loza de San Claudio / San Cloyo. Fue después de dos concursos de acreedores y una encarnizada lucha de dos años, protagonizada fundamentalmente por mujeres, que ocupaban el 80% de los puestos.
Mari Paz García Pérez y María José Mon son dos de las últimas trabajadoras de la Fábrica de Loza de San Claudio. Regresan 10 años después del cierre al taller de decoración donde dejaron media vida.
La mano de obra tuvo acento de mujer en la locería. Trabajo intergeneracional, por donde llegaron a pasar abuelos, padres e hijos de varias familias.
José Luis aprendió el oficio en la Fábrica de Loza de Gijón / Xixón y tras dos años se trasladó a San Claudio.
En los años noventa la fábrica fue adquirida por el empresario Ruiz de Alda y empezó su decadencia. Las huelgas y movilizaciones, protagonizadas en su mayoría por mujeres, lograron frenar un primer concurso de acreedores, pero no así el segundo. Tras dos años de pelea, la fábrica cerró.
Fue tal día como hoy, un 30 de abril de 2009, dejando en la calle a 150 trabajadores que la lucha contra el cierre, y décadas entre vajillas y esmaltes, unió para siempre.