Fuente: EFE, 25 de julio. 2024 19:16

El HUCA, segundo centro español en implantar una prótesis osteointegrada en el fémur

HUCA en Oviedo

La pierna artificial se conecta directamente al esqueleto del paciente

El Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) se ha convertido en el segundo centro sanitario del país en implantar una prótesis integrada en el interior del fémur de un paciente con una extremidad inferior amputada, tal y como han anunciado este jueves los doctores responsables de la operación en una rueda de prensa.

El fundamento en el que se basa la intervención es similar al de los implantes dentales y se conoce como osteointegración, que es la capacidad de las células humanas para adherirse a una superficie metálica, lo que permite una conexión directa, estructural y funcional con el tejido óseo vivo.

La operación, que solo tiene precedentes en España en el Hospital del Vall d'Hebrón de Cataluña, se ha realizado en un paciente gijonés de 44 años al que le fue seccionada quirúrgicamente la pierna derecha a causa de una malformación congénita hace años.

La implantación de esta prótesis, desarrollada por el Macquarie University Hospital de Sidney, ha sido presentada este jueves en el HUCA por los facultativos responsables del proyecto, los doctores José Antonio Fidalgo, del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación y David Alonso, facultativo del Servicio de Traumatología, así como por Josina Villanueva, directora del centro.

Las ventajas de la prótesis

Según han explicado, la ventaja de las prótesis osteointegradas es que la pierna artificial se conecta directamente al esqueleto del paciente, lo que facilita "un ajuste perfecto" y, por tanto, mayor seguridad, estabilidad y calidad de vida, evitando los problemas como infecciones o dolores que provocan las prótesis tradicionales en algunos pacientes y permitiéndoles caminar de modo más natural.

Otra ventaja de este tipo de prótesis, que están especialmente indicada para pacientes amputados por encima de la rodilla y sufren problemas con las prótesis convencionales, es que el usuario se puede colocar la prótesis en apenas diez segundos, frente a la mayor complejidad que presentan las prótesis clásicas, han detallado los doctores.

En el caso del paciente intervenido en el HUCA, los doctores han explicado que trabaja de pie y que llevaba cinco años con problemas en el muñón como “infecciones de repetición, heridas y rozaduras, dolor lumbar por desequilibrio pélvico e inestabilidad”.

La intervención, que se realizó mediante una única cirugía y no mediante dos como se hace en otros centros, tiene además la ventaja de que permite colocar la pierna artificial mucho antes y comenzar la rehabilitación a los dos o tres días de la intervención, con una duración total de unos seis meses, según ha explicado los doctores.

En concreto, al paciente del HUCA se le implantó la nueva prótesis el 10 de julio y ya ha iniciado el proceso de rehabilitación para “acostumbrarse a un nuevo patrón de marcha más natural” y recuperar el tono de los músculos como el cuádriceps, atrofiado como consecuencia del uso de la prótesis anterior, en la que el peso del cuerpo no recaía en el fémur.

“La osteointegración mejora su calidad de vida, su imagen corporal, su capacidad de caminar y hacerlo de forma natural, con sensaciones y sin tener que mirar al suelo, así como la facilidad para ponerse y quitarse la prótesis, la movilidad y el confort en general”, ha explicado el traumatólogo responsable de la intervención, David Alonso.

El Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) es un centro de referencia en la implantación de prótesis para pacientes amputados y realiza al año unas 90 intervenciones, según han detallado los doctores.