Un gol de Nacho Méndez al inicio da la victoria al Sporting (1-0)
El Real Oviedo reclamó dos penaltis que el VAR no concedió
Un gol de Nacho Méndez en el minuto 2 de partido acabó dando la victoria al Sporting a pesar de que se vio superado por el Real Oviedo que pagó caro su falta de acierto y reclamó dos penaltis que el VAR no concedió.
El Sporting llegaba al derbi con muchas cosas en contra, como varias ausencias por lesión o sanción de jugadores importantes o estar inmerso en la primera crisis de resultados de la temporada tras encajar dos derrotas consecutivas que le han sacado de las posiciones de play off.
El Real Oviedo por su parte lo hacía en un mejor momento y en plena racha ascendente a pesar del tropiezo de la pasada jornada, lo que hizo que el derbi regional de esta temporada fuese el más atractivo en muchos años, y reflejo de ello fue la gran entrada que registró El Molinón.
Sin embargo, a los rojiblancos el partido se les puso de cara nada más comenzar ya que en el primer ataque local Nacho Méndez adelantó a los suyos con un gran disparo desde el borde del área que se coló por una escuadra ante un sorprendido Leo Román.
Un gol tempranero que hizo que el Sporting dominara durante los siguientes minutos en los que los ovetenses se vieron encerrados en su medio campo, y aunque se jugaba en las inmediaciones del área azul, Leo Román no pasó por más ocasiones de peligro.
Poco a poco, el Real Oviedo se fue haciendo con el dominio del balón y a acercarse a la portería rojiblanca , con lo que la defensa comenzó a tener trabajo porque los ataques azules empezaban a crear peligro.
Los visitantes tuvieron una gran ocasión en un centro de Borja Bastón que Paulino no acertó a rematar cuando se encontraba solo y al borde del área pequeña desperdiciando una gran ocasión para lograr el empate.
Cinco minutos después, el propio Paulino remató de cabeza ligeramente alto, cuando ya el control del partido era totalmente visitante, lo que llevó a la afición a redoblar sus cantos de ánimo.
El Oviedo seguía atacando con protagonismo especial de Viti y Paulino mientras que el Sporting perdía el balón rápidamente a excepción de una internada culminada por Gaspar Campos con un disparo flojo y al centro de la portería que detuvo sin problema el portero ovetense.
Si grande fue el fallo de Paulino en la primera parte, más grande fue el de Fran Villalba en el inicio de la segunda en la que remató de cabeza un centro de cabeza que envió alto cuando se encontraba prácticamente sobre la línea de gol.
El árbitro consultó al VAR una falta de Pablo García sobre Moyano, pero decretaron que fue fuera del área en unos minutos en los que los dos equipos estaban luchando por el control del partido y en el que los dos entrenadores comenzaron con los cambios.
Como sucediera en la primera parte, fue el Real Oviedo el que pasó a dominar, con más jugadas en el medio campo local que en el visitante y ocasiones de peligro constantes, aunque los azules no estaban acertados en sus finalizaciones.
El Real Oviedo reclamó con insistencia un penalti sobre Alemao que el árbitro consultó de nuevo con el VAR y tras verlo personalmente no lo señaló lo que levantó el enfado de la afición visitante.
El partido se acercaba al final y el resultado podía cambiar en cualquier momento porque el Real Oviedo intentaba el empate y el Sporting defendía con uñas y dientes el gol conseguido en los primeros minutos.
Leo Román subió a rematar un córner en el tiempo añadido y el rechace del portero local motivó una contra en la que Mario González se quedó solo con el balón, todo el campo para él y la portería vacía pero finalmente su disparo se fue fuera.
Fue la última acción del partido y un ejemplo de los problemas ofensivos de un Sporting que al final se llevó los tres puntos en un partido en el que se vio superado por un Real Oviedo que no supo culminar ese dominio .
La afición local y los jugadores del Sporting celebraron la victoria durante muchos minutos dentro del estadio, ya que suponía romper una larga racha de resultados adversos en sus enfrentamientos ante el Real Oviedo.