La facturación de las peluquerías asturianas cae más de un 20% en tres años

El gremio sigue reclamando mejoras en un sector considerado esencial

El Día Mundial del Peluquero llega con sabor agridulce. En Asturias, la facturación del sector ha caído más de un 20% desde la pandemia, más que la media nacional. Unido a la subida de impuestos y salarios, hace que los autónomos, que son más del 80%, vivan una situación crítica.

Este es el caso de Liliana Fanjul, que tiene su peluquería abierta desde 2012. Tras más de diez años, ve "insostenible" la situación.

Esta peluquera forma parte del movimiento 'Creer en Nosotros', que quiere visibilizar la situación del sector. Por otro lado está Jorge Sotolongo, que abrió su negocio en 2014, y que apuesta por la innovación para intentar atraer a los clientes y mantener su negocio.

Unos problemas que, según el informe de la Asociación Nacional de Empresarios de Peluquería, Estética e Imagen Personal, afectan de manera crítica al 56% de los salones españoles.