EDP maneja varios proyectos relacionados con la transición energética en Asturias que suman una inversión de 470 millones de euros, principalmente relacionados con el hidrógeno verde y el almacenamiento energético en sus instalaciones de Soto de Ribera y de Aboño, y la construcción de un parque eólico marino flotante en la costa asturiana.
Así se lo han trasladado este viernes el presidente de EDP, Manuel Menéndez, y su consejero delegado, Rui Teixeira, al jefe del Ejecutivo asturiano, Adrián Barbón, en un encuentro en la sede de Presidencia del Principado.
Según ha detallado en un comunicado la compañía, que aspira a ser una energética 100 % verde en 2030, EDP estudia convertir la central de Soto de Ribera "en centro de referencia del almacenamiento de energía renovable y nuevos usos del hidrógeno verde".
La empresa portuguesa ya ha iniciado la tramitación de una central minihidráulica con hidrotornillos que aprovecharía las aguas del Nalón a su paso por la central, instalación se sumará a un parque fotovoltaico que la compañía tiene previsto poner en marcha en los terrenos de este emplazamiento.
La energía renovable generada por ambas instalaciones se vertería a la red para atender la demanda, permitiría producir y almacenar hidrógeno verde, mientras que el excedente se almacenaría en dos tipos de baterías: de Ion Litio y una combinación de baterías RedOx y de segunda vida, por ejemplo las de los vehículos.
EDP, que también trabaja en varias iniciativas relacionadas con el almacenamiento de aire líquido para generar energía eléctrica, trabaja además en diferentes proyectos relacionados con los nuevos usos del hidrógeno verde.
A este respecto, ha apuntado su previsión de construir una hidrogenera -gasolinera de hidrógeno- que contribuiría a la descarbonización del transporte de viajeros y mercancías, y de realizar ensayos en los ciclos combinados para la sustitución del gas natural que se usa actualmente por el hidrógeno verde.
La multinacional también proyecta convertir su central de Aboño en un "emplazamiento estratégico" del hidrógeno verde al considerar que el conocimiento técnico, del mercado y la situación geográfica privilegiada de la instalación, garantizarían la producción y suministro para la industria asturiana de la electricidad y el hidrógeno verde necesarios en sus procesos de fabricación.
EDP contempla también la puesta en marcha de un parque fotovoltaico en las actuales instalaciones de Aboño, que sumado al parque eólico marino flotante que la compañía proyecta en la costa asturiana "y junto al fácil acceso al agua, a las infraestructuras eléctricas y al puerto de El Musel" permitirían la producción y almacenamiento necesario de hidrógeno verde en Aboño.
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