La inflación subió en mayo en España hasta el 3,6%, según el avance de datos publicado hoy por el Instituto Nacional de Estadística.
Un incremento que se explica por la subida de los precios de la electricidad frente a las bajadas de mayo del año pasado, y la menor bajada de los carburantes.
La inflación subyacente, la que no tiene en cuenta ni los precios de los alimentos frescos ni de los productos energéticos, se mantuvo estable situándose en el 3%. Es una décima más que en el mismo mes del año pasado. Se atribuye al aumento de los servicios y paquetes turísticos.
Respecto a abril, los precios crecieron tres décimas, cuatro menos que en abril y la menor subida desde enero.
Según el Ministro de Economía, los precios se han mantenido estables en los últimos meses favoreciendo a familias y empresas.
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