Danone presentará la empresa que podría buscar la recolocación externa de los trabajadores de Salas
El Principado pide a Danone que no obstruya el traspaso de su planta de Salas
Danone presentará esta tarde al comité de la planta de Salas la empresa que podría encargarse de la recolocación de los trabajadores. Es una empresa externa que se encargaría de analizar la formación de los empleados, y entrevistarse con ellos para buscarles un nuevo trabajo dentro de Asturias acorde a sus conocimientos.
También está previsto que se les expliquen los planes de formación continua. Danone mantiene que el 100% de la plantilla tendrá garantizado su futuro laboral, pero los sindicatos son escépticos. Aseguran que la mejor vía sería la venta de la factoría en Salas y confían en que antes de tres meses se encuentre un comprador.
Tanto Danone, el Gobierno del Principado y la Cámara de Comercio ya han comenzado a buscar posibles inversores. El jueves hay convocada una manifestación en Salas contra el cierre de Danone.
El Principado pide a Danone que no obstruya el traspaso de su planta de Salas
El Gobierno asturiano ha pedido hoy a la multinacional Danone que "no obstruya y agilice lo máximo posible" el traspaso de la planta que tiene en Salas a un inversor que garantice la continuidad de su actividad con un proyecto agroalimentario que podrá beneficiarse también de la financiación y aportación de ayudas de ámbito estatal.
El consejero de Industria , empleo y Promoción Económica, Enrique Fernández, ha hecho este llamamiento en el pleno de la Junta General del Principado, donde ha respondido a una interpelación del PP y a tres preguntas de Foro, IU y Podemos en las que le han pedido que explicase lo que está haciendo el Principado para evitar el cierre de la planta láctea.
La dirección de Danone, que ha planteado el cierre de su planta en Salas y la aplicación de un ERE de extinción para sus 69 trabajadores antes de final de año, ha accedido a estudiar la posibilidad de la venta de las instalaciones a un inversor y se ha ofrecido a negociar prejubilaciones, indemnizaciones y recolocaciones en otras plantas.
Los planes de la empresa pasan por mantener la producción hasta después de verano y después comenzar a trasladarla a Francia de forma paulatina hasta el cierre de la factoría, previsto para antes de final de año.
Fernández se ha mostrado "relativamente optimista" respecto al futuro de las instalaciones de Salas ya que, en su opinión, no sólo hay que tener en cuenta que el sector agroalimentario tiene futuro en Asturias, por la cantidad y calidad de la materia prima que tiene, sino por el hecho de que quien se haga cargo de la misma dispondrá de financiación para su proyecto.
El Gobierno de España ha comprometido una inversión de 1.800 millones de euros a través del Plan estratégico de recuperación y transformación (PERTE) del sector agroalimentario, un plan que en Asturias puede beneficiar a quienes se planteen mantener la actividad en la planta que Danone abrió en Salas en 1981.
Según el consejero, eso permite alimentar cierto optimismo, aunque también habrá que exigir a Danone desde todos los ámbitos que agilice lo máximo posible el traspaso porque cada día que pasa se perpetúa el dolor de los trabajadores afectados por el cierre.
Por se una actividad industrial de carácter estratégico y estar enclavada en un municipio especialmente afectado por la transición energética, Fernández ha asegurado que el Gobierno asturiano "no escatimará recursos para tratar de buscar una continuidad de la actividad industrial en esa planta", el único escenario de futuro que contempla como válido.
Fernández ha reconocido que, hasta el momento, la compañía láctea no ha comunicado oficialmente el expediente de regulación de empleo de los trabajadores de la planta, pero que sí ha comunicado a la representación social que tiene previsto cerrar la negociación en unos tres meses.
Ese tiempo, según el consejero, debe ser aprovechado para buscar soluciones y dar continuidad a la planta, de cuyo cierre ha responsabilizado exclusivamente a la multinacional francesa, una decisión que dio a conocer hace menos de dos semanas "sin ningún tipo de preaviso" al Principado.
No obstante, ha descartado la posibilidad de que, de manera unilateral y al margen del resto de autonomías, el Principado pueda adoptar medidas que penalicen la deslocalización de empresas porque eso también afectaría negativamente a la hora de atraer nuevas inversiones.