El comité de CaixaBank denuncia que los despidos pagarán el aumento de sueldos de los directivos

Ripa rechaza la excusa del banco para basar los despidos en la digitalización

El Comité de Empresa de CaixaBank en Asturias han denunciado este miércoles que el ERE "salvaje" planteado por la dirección de la entidad financiera que afecta a 7.791 trabajadores, de los que 65 corresponden a Asturias, se realiza para incrementar los sueldos de los directivos, que en el caso del presidente, José Ignacio Goirigolzarri, percibirá una remuneración fija anual de 1,65 millones, el triple de la que tenía como presidente de Bankia.

Los miembros de UGT Ana Juesas y Hugo Candanedo y de CCOO Daniel Álvarez Junco, en el Comité de Empresa, han ofrecido este miércoles una rueda de prensa junto a el portavoz de Podemos Asturies, Daniel Ripa, en el marco de los encuentros previstos con los grupos de la Junta General con el fin de recabar el apoyo institucional de la Cámara en contra de la decisión del banco.

La dirección de CaixaBank rebajó el alcance del ERE que el banco quiere llevar a cabo en España, de los 8.291 empleados iniciales a un total de 7.791, lo que supone 500 menos que en su primera propuesta, y prometió además recolocar al 100% de los empleados afectados.

La dirección y los trabajadores se reúnen hoy en Barcelona para tratar de solucionar el conflicto laboral que está en período de consultas hasta el 10 de junio, si bien podrá ampliarse si las dos partes así lo acuerdan.

En este sentido, Junco ha señalado que el calendario de movilizaciones se establecerán a partir de hoy si en la reunión prevista en Barcelona la empresa se mantiene en su postura y "no da su brazo a torcer" para paralizar este ERE "denigrante" con los trabajadores.

Juesas ha señalado como "inaceptable" la propuesta de expediente de la empresa que afecta casi al 20 por ciento de la plantilla en la región cuando la entidad "presume de su compromiso social".

Por su parte, Candanedo ha apuntado las "malas condiciones" que quedarán a aquellos trabajadores que no sean despedidos de la CaixaBank, ya que verán cómo se les "rebajan" sus pluses y, también, sus condiciones laborales.

A juicio de los representantes de los trabajadores, resulta enormemente injusto que una entidad como CaixaBank tramité este expediente de regulación al tratarse de un banco que ha producido unos beneficios de más de 514 millones en el primer trimestre del año, 4.786 millones si se contabilizá los efectos de su fusión con Bankia.

Por su parte, Ripa ha rechazado la excusa del banco para basar los despidos en la digitalización y ha indicado que la fusión de dos oficinas cercanas en una sola supondrá el despido de trabajadores pero con el mismo trabajo al tener las mismas cuentas, lo que supondrá "una sobrecarga para los empleados y una pérdida de la calidad del servicio que sufrirán los usuarios de este banco".

Para el diputado de la formación morada es necesario que la Junta General muestre una oposición unánime de todos los grupos que la integran en contra de este expediente laboral y que inste al Congreso a que interceda para dar una solución satisfactoria a los intereses de los trabajadores.