Los líderes del PSOE, decepcionados y sorprendidos por el escándalo de Villa

Todos coinciden en que la noticia les ha hecho daño

Decepción y sorpresa, son los dos calificativos más repetidos entre los líderes del PSOE sobre el escándalo de Villa. 

Reunidos ayer en el 40 aniversario del congreso de Suresnes, que supuso el relevo de la dirección del partido, no escatimaron en críticas a lo sucedido.

Entre los veteranos el más indignado, el ex presidente Extremadura, Rodríguez Ibarra quien ha señalado que "lo de pujol me sorprenció muchísimo, pero no me disgustó como lo de José Angel Fernández Villa".

Asimismo, la ex Ministra Trinidad Jiménez ha dicho sentir un "profundísimo dolor" al tratarse de un símbolo, un ejemplo de sindicalista".

Menos contundente fue la respuesta del ex viceprente del Gobierno, Alfonso Guerra, gran amigo del ex líder sindical, quien ha afirmado haberse llevado una decepción muy grande.  

También prudencia ha pedido la ex ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, quien argumentaba para no dar su parecer, su propia experiencia como imputada en el caso de los ERES de Andalucía. 

Por otro lado, hubo quienes se limitaron a defender la actuación de Javier Fernández tras conocer el escándalo, como Micaela Navarro o el exsecretario de Organización del PSOE, Óscar López.

Quien no ha querido volver a pronunciarse sobre el caso Fernández Villa ha sido el secretario general del PSOE, que el pasado fin de semana ya había dicho que le daba "asco". 

En cambio Sánchez sí que ha elogiado la intervención de Javier Fernández en el Debate de Orientación Política, que ha seguido en TPA.