Energía pide a Iberdrola las cuentas de los tres últimos años de Lada y Velilla

El presidente de Iberdrola cree que el Gobierno le permitirá cerrar las centrales

El Ministerio de Energía ha activado esta tarde el Real Decreto por el que regula el cierre de centrales eléctricas en España. El decreto tendrá carácter retroactivo y pretende asegurar que las decisiones de cierre sean "coherentes con los instrumentos de planificación energética" y "compatibles con los objetivos en materia de seguridad del suministro, sostenibilidad y precio de la energía".

El ministerio ha solicitado a Iberdrola que remita las cuentas de los últimos tres años de sus plantas térmicas de Lada y Velilla. Este reglamento valorará la coherencia del cierre con el cumplimiento de los objetivos medioambientales y del clima, así como la coherencia de los precios y la competencia del mercado eléctrico.

El ministro de Energía ha asegurado que es necesario mantener las centrales de carbón y que el cierre de Lada, en Asturias y Velilla en Palencia, tiene que ser compatible con la política energética. Por su parte, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, se ha mostrado seguro de que el Gobierno no va a poner dificultades al cierre de las térmicas.

Es necesario mantener la centrales de carbón y cualquier cierre tiene que respetar el equilibrio entre los sistemas de generación de energía, según ha declarado Álvaro Nadal.

Por su parte, el presidente de Iberdrola se mostrado seguro de que el Gobierno no va a poner dificultades al plan de cierre. Ignacio Sánchez Galán ha reiterado su compromiso con la descarbonización y el medioambiente.

El Gobierno no pone fecha de respuesta a la solicitud de clausura. Lo que sí se sabe es que es una situación sin precedentes. Se había pedido la hibernación, pero nunca el cierre de una central térmica. El departamento de Nadal tiene que pedir ahora un informe a Red Eléctrica. Este organismo es el encargado de analizar cómo afectaría la ausencia de dos térmicas a la cobertura de la demanda de energía.

En la térmica de Lada trabajan 200 personas entre empleos directos e indirectos. Además, cerca de una treintena de conductores se dedican de manera exclusiva a transportar el carbón de importación que se quema en la central. Al cabo del día se trasladan unas 2.000 toneladas.

El apagado de la térmica también se notaría en el puerto de El Musel donde se descargan unas 450 toneladas anuales, a las que hay que sumar otras 200.000 para la térmica de Velilla. El carbón para Iberdrola supone el 3,7% del total de graneles que descarga la Ebhi en un año.

UGT ha convocado esta mañana una concentración a las puertas de la central térmica de Lada para que Iberdrola no la cierre en cuatro años.

Aseguran que la planta es rentable y que se invirtieron muchos millones para que sea respetuosa con el medio ambiente. Ahora, están manteniendo una reunión con recursos humanos de la empresa porque 90 trabajadores directos y 100 subcontratados se irán a la calle.