Rajoy acepta el encargo del Rey de someterse a la investidura
Va a la investidura con la promesa de buscar pactos para la estabilidad
Mariano Rajoy ha aceptado el encargo del Rey de someterse de nuevo a la investidura, esta vez con la certeza de que será reelegido, y lo ha hecho con el propósito de que trabajará por tener un gobierno "estable y duradero" mediante el "diálogo" y los "acuerdos" con los partidos políticos.
Felipe VI ha concluido esta tarde su ronda de consultas y, como era previsible, ha propuesto a Rajoy como candidato a la investidura, tras escuchar al presidente de la gestora, Javier Fernández, la confirmación de que el PSOE se va a abstener, una decisión que sigue causando una profunda división entre los socialistas.
Rajoy pronunciará mañana su discurso de investidura en un debate que comenzará a las seis de la tarde, tal y como ha decidido la presidenta del Congreso, Ana Pastor.
Aún está por determinar el orden de dicho debate, que se acordará mañana en la Junta de Portavoces, y por tanto cuándo tendrá lugar la primera votación, en la que necesita mayoría absoluta, y la segunda, en la que ya sólo requiere mayoría simple, 48 horas después de la primera.
La previsión es que Rajoy sea reelegido en la segunda votación, que, según fuentes parlamentarias, todo indica tendrá lugar el sábado por la tarde.
El presidente en funciones ha anunciado en rueda de prensa en la Moncloa que ha aceptado el encargo del Rey "sin ningún tipo de recelo" y ha prometido trabajar "desde el primer día" para que su Gobierno sea "capaz, estable y duradero". Algo que solo será posible, ha reconocido, "con diálogo y con acuerdos".
Sus primeras palabras han sido de agradecimiento al PSOE por la decisión "razonable y responsable" de abstenerse, así como a Ciudadanos por llegar a un pacto de investidura con el PP.
Tras recordar que siempre ha dicho, desde el pasado diciembre, que los resultados electorales obligaban a los "partidos constitucionalistas" a entenderse, Rajoy ha celebrado que este entendimiento haya sido finalmente posible, "aunque sea de forma limitada".
En cualquier caso, ha valorado el "acuerdo clarísimo y rotundo" que hay para evitar terceras elecciones, lo que de por sí ya trae, ha recalcado, "consecuencias muy positivas para España".
Por su parte, el presidente de la gestora del PSOE, Javier Fernández, ha dejado claro tras la audiencia con el Rey que los socialistas "en ningún caso" darán estabilidad al PP, ni se plantean apoyar los presupuestos del próximo año.
Fernández ha argumentado que "hay otros lugares políticos en los que el PP puede buscar apoyo, para lo que no necesita mayoría absoluta, sino simple".
Sobre la fractura en el seno de los socialistas a cuenta de la abstención, Fernández ha asegurado que no está pensando en aplicar "medidas punitivas" a los diputados que rompan la disciplina de voto, sino que lo que quiere es "persuadirlos" para que no tomen esa decisión, incluidos los siete del PSC, que esta tarde ratificará el no a Rajoy en su Consell Nacional.
En este sentido, ha pedido a los socialistas catalanes que, a la hora de tomar una decisión, "tengan en cuenta que el domingo participaron en un órgano democrático" como el Comité Federal del PSOE, "para que luego no se enfrenten dos legitimidades".
Ha aprovechado, asimismo, para replicar a Pablo Iglesias que, mientras Podemos "tomará la calle", el grupo socialista "liderará la oposición" en el Congreso.
Antes, el líder de Podemos ha arremetido de nuevo contra el PSOE por haberse pasado del no a la abstención y advertía de que será "difícil" que tanto los socialistas como Ciudadanos se presenten ante la sociedad como partidos de la oposición.
Iglesias ha advertido de que esta legislatura se va a caracterizar por los "garrotazos de cara a la galería" entre PP, PSOE y Ciudadanos durante el día y los "acuerdos estratégicos por la noche" entre estas tres fuerzas.
Será, ha lamentado, una "triple alianza" que irá "mucho más allá de la investidura" en una legislatura que además pronostica larga.
El líder de Podemos ha explicado también que ha conversado sobre la reforma de la Carta Magna con el Rey, al que ha advertido de su escepticismo ante la posibilidad de que una modificación de este tipo pueda salir adelante, sobre todo en lo que se refiere al encaje de Cataluña.
Mientras, el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha contado que ha hablado por teléfono con Rajoy y le ha confirmado el sí de su formación a la investidura para superar finalmente el "desbloqueo", "cerrar una etapa gris" y de "rojos y azules" y poner en marcha las "soluciones" que demanda la gente.
Rivera ha criticado duramente a Podemos por preferir "rodear el Congreso" a trabajar desde dentro. "Lo que le pido a Podemos e IU es que, ahora que hemos logrado que se acabe el bipartidismo y que haya cuatro grupos mayoritarios en el Congreso y que algunos de los anhelos del 15M estén en el Congreso, trabajen desde el escaño y no desde fuera", ha reclamado.