Eduardo Santos fue el impulsor de la ley contra la pederastia en la Iglesia en Navarra

N'asturianu: Eduardo Santos foi'l impulsor de la llei escontra la pederastia na Ilesia en Navarra

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0:00Lo que pasa es que la norma se
0:02centra en el reconocimiento y la
0:03reparación más en la víctima que en
0:05el agresor.
0:06Lo primero que tenemos que hacer en
0:08cualquier catástrofe, y más en
0:09cualquier delito, es acoger a la
0:11víctima, sanarla, intentar
0:12repararla, intentar acogerla, no
0:14ver qué necesita.
0:15Después ya veremos.
0:18Lo segundo es que con respecto
0:20al agresor, lo fundamental es que
0:21reconozca el daño causado y
0:23tenga una posición favorable
0:25a repararlo.
0:26Una de las carencias fue la falta de
0:28unanimidad política, pero el tiempo
0:30ha facilitado una aceptación de la
0:31ley por parte de los partidos y
0:33la propia Iglesia.
0:34Hasta el punto en que la Iglesia
0:35Católica ha reconocido, acepte o ha
0:38aceptado participar
0:40en la comisión que establece la Ley
0:42para el Reconocimiento oficial de
0:43las Víctimas. Se le reservaron dos
0:45asientos y a su vez, el arzobispo
0:48de Pamplona ahora mismo se abre
0:50incluso a indemnizar económicamente
0:51a aquellas víctimas que sean
0:53reconocidas por el sector público.
0:55Este proceso para crear la ley lo
0:57recoge Eduardo Santos ahora en un
0:59libro. Lamenta que no se haya
1:00promovido una norma similar a nivel
1:02nacional y lo achaca a intereses
1:04partidistas.

Asegura que la norma se centra en el reconocimiento y la reparación

Navarra cuenta desde hace tres años con una ley contra la pederastia en la Iglesia. Eduardo Santos fue el impulsor de la norma y desataca su carácter restaurativo y la aceptación de la misma, después de tiempo, por parte de la Iglesia navarra.

En una entrevista en TPA Noticias Matinal, explica que norma se centra en el reconocimiento y la reparación, más en la víctima que en el agresor.

Una de las carencias fue la falta de unanimidad política pero el tiempo ha facilitado una aceptación de la ley por parte de los partidos y la propia Iglesia.

El proceso para crear la ley lo recoge Eduardo Santos ahora en un libro. El autor amenta que no se haya promovido una norma similar a nivel nacional y lo achaca a intereses partidistas.