Fuente: TPA / EFE, 6 de agosto. 2021 21:03

Comienza la exhumación de los primeros cuerpos localizados en la fosa común de El Rellán

La exhumación de la fosa de El Rellán ha permitido localizar ya doce cuerpos

Al pie de la fosa, siguiendo los trabajos, han estado familiares de los asesinados

En la fosa de El Rellán, en Grau, esta tarde ha comenzado la exhumación de los primeros cuerpos localizados.

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha hallado los restos óseos de 12 personas, tan solo dos días después de retomar los trabajos de exhumación en la finca de La Chabola.

Según ha explicado el vicepresidente de la ARMH, Marco González, los restos siguen apareciendo "apelotonados, unos encimas de otros" y además se han encontrados casquillos de balas de 9 milímetros. Además, ha señalado que también han localizado gomas de madreñas, el calzado tradicional asturiano, lo que confirmaría que las personas enterradas en El Rellán eran civiles y no militares.

Los trabajos en la zona se prolongarán hasta el domingo o lunes, en función de los descubrimientos, y están siendo "complicados" debido al componente arcilloso del suelo de la zona donde se ha realizado la exhumación hasta una distancia de dos metros de la construcción.

Hoy se ha celebrado un acto con unas 25 familias que creen que sus familiares se encuentran enterrados en la zona mientras que decenas de personas se han acercado hasta la finca para seguir los avances de la exhumación.

Dolores Fernández ha sido hoy la primera en llegar a la fosa común en El Rellán. Tenía solo unos meses cuando su padre fue asesinado. A sus 84 años, frente a la fosa donde cree que pudo ser asesinado, es incapaz de hablar.

A sus 89 años a Sabino Fernández la mirada se le perdía entre los restos descubiertos. Quizá alguno sea el padre que perdió con seis años y a María Luisa Flórez, de 95 años, aún le queda energía para seguir buscando a su padre.

Son tres ejemplos de los muchos familiares que se han acercado para conocer la evolución de los trabajos. La actividad se centra en la zona próxima a la gochera, donde han aparecido varios cráneos más.

Es el grito silencioso de un pasado ocultado durante más de 80 años. La fosa de El Rellán por fin empieza a hablar.