Un ganadero denuncia que la empresa encargada de retirar los animales muertos se niega a llevarse una vaca fallecida el jueves

La empresa responsable de la recogida alega que el protocolo les impide entrar en las explotaciones

Las últimas 72 horas están siendo un quebradero de cabeza para José Fernández. Este ganadero de As Candaosas, en Villayón, denuncia que la empresa encargada de retirar los animales muertos se niega a llevarse una vaca fallecida el pasado jueves.

Tres días después, el animal sigue en el interior de la cuadra, en proceso de putrefacción, cada vez más hinchado y con la amenaza de explotar en cualquier momento. Pero nadie, dice, le da una solución mientras el olor y el riesgo sanitario aumentan.

Fernández señala que nunca antes le había sucedido algo similar. Las dimensiones de la entrada a su casa permiten el acceso de los camiones que hasta ahora se habían llevado otros animales muertos.

Un ejemplo más, lamenta, del abandono que manifiesta sentir el mundo rural.

La empresa responsable de la recogida alega que el protocolo les impide entrar en las explotaciones

Desde la empresa concesionaria encargada de recoger las reses muertas en el occidente de Asturias aseguran que el protocolo establecido por ley les impide entrar en las cuadras por razones sanitarias.

El procedimiento es pactar con el ganadero un punto de recogida minutos antes de que llegue el camión y siempre dentro de las 48 horas siguientes al aviso.

Los responsables de la concesionaria aseguran que recogen 60 animales de media al día y desconocen por qué el afectado de Villayón no se atuvo a las normas.