Fuente: EFE, 3 de junio. 2016 14:21

"Otero no era Dios ni decidía todas las compras", subraya su abogada

'Otero no era Dios ni decidía todas las compras', subraya su abogada

La letrada ha llamado a testificar a dos directores de institutos, de Mieres y Gijón

La abogada de la ex directora general de Planificación, Centros e Infraestructuras en la Consejería de Educación, María Jesús Otero, ha subrayado hoy que su defendida "no era Dios", ni la única persona de este departamento que decidía qué se tenía que comprar.

En declaraciones a Efe tras terminar una nueva sesión de la vista oral del caso Renedo, Ana Muñiz ha explicado que lo que ha intentado acreditar con los testigos que ha llevado hoy a la sala es acabar con la "idea generalizada" de que su defendida era la única persona que "decidía y compraba" en la Consejería, cuestión que, según ha puntualizado, "dista mucho de ser la verdad".

La letrada ha llamado a testificar a dos directores de institutos, de Mieres y Gijón, que han asegurado contar con cierta autonomía, hasta 600 euros por compra con un presupuesto total de 10.100 euros año.

Así lo ha confirmado la directora del instituto Ramón Campoamor de Gijón, que ha especificado que ante la realización de obras o compras de más envergadura presentaba tres presupuestos a la Consejería y se elegía el más barato.

La directora ha recordado que hubo que desalojar el centro tras el informe técnico de la Consejería que señalaba una situación de peligro para los más de 200 alumnos debido a la existencia de grietas en el edificio.

En este sentido, la abogada de Otero ha apuntado que para este caso como para otros que llevaban a la Consejería a finales de curso cuando ya no se disponía dinero del presupuesto para afrontarlos, se recurría a mover dinero de otros expedientes para poder acometer estas obras urgentes.

Muñiz cree que "hay varias cosas que se están obviando" en este juicio, como que "en los centros no faltaba absolutamente nada, que el presupuesto que se les adscribía era para ellos y que si había veces que había que hacer cambios en los expediente era por razones de urgencia".

"En los informes de Hacienda todo lo que hay se achaca a Otero, parece que tiene la culpa del hambre en el mundo y eso no es así, ya que Igrafo y Almacenes Pumarín pagaban cosas con patrocinios a la Consejería que no eran para Otero", ha aseverado.

Por su parte, la ex jefa de sección de Servicios Complementarios, también llamada a testificar por Muñiz, ha asegurado que nunca recibió una orden directa de Otero para la realización de alguna compra, aunque ha reconocido, a preguntas de la fiscal del caso, que su jefe directo no era la acusada.