Alonso acusa al Ministerio de "despreciar" a las CC.AA. con las reválidas
"Los alumnos no se comparan, se consideran"
El consejero de Educación del Gobierno asturiano, Genaro Alonso, ha acusado hoy al Ministerio de tratar "con desprecio" a las comunidades autónomas al incumplir su compromiso de convocar una Conferencia Sectorial para abordar la implantación de las reválidas previstas en la Lomce.
En rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno, Alonso ha recordado que dicho órgano, que se reunirá el próximo 13 de mayo no se convoca desde agosto de 2015, y ha rechazado el diseño de las pruebas realizado por el Gobierno,
"O se deroga o se cambia o todas las medidas no conducen a ningún sitio", ha señalado Alonso, que ha lamentado además que la Conferencia de Rectores (CRUE) diera el visto bueno al sistema de evaluación final al concluir el Bachillerato, un nuevo modelo que hará que las comunidades autónomas asuman la tarea de realizar la prueba de acceso que hasta ahora hacían las universidades.
El consejero asturiano ha advertido a los rectores de que el sistema educativo "es uno" y las universidades forman parte del mismo aunque hayan optado por mirar "para la parte que más les conviene" y dejar la realización de los exámenes y las calificaciones en manos de las autonomía para limitarse luego a matricularlos a partir de la nota que obtengan.
Además, ha señalado que se trata de un esfuerzo "grandísimo" para las comunidades dado que deberán asumir una PAU que llevaba veinte años haciéndose de una determinada manera con el agravante de que el número de alumnos que se presentarán al examen será superior ya que incluirá a aquellos que no quieran cursar estudios universitarios pero que necesitan superar la reválida para titular.
En este sentido, ha recordado que, aunque en el próximo curso la reválida de Educación Secundaria y Bachillerato sólo tendrá validez a efectos de ordenar el acceso a la Universidad, a partir del siguiente periodo lectivo la aprobación de dicha prueba final determinará si los estudiantes obtienen o no la titulación "con lo que decir que es similar a la PAU esconde una trampa".
De esta forma, ha advertido, se "condenará" al fracaso escolar a los alumnos que no superen la reválida pese a tener aprobadas las asignaturas, una medida que ha rechazado al considerar que lo que el profesor valida "no es necesario revalidarlo" y supone desconfiar de la valoración de los docentes y de los centros educativos.
"Los alumnos no se comparan, se consideran", ha apuntado el consejero antes de anunciar que las pruebas de reválida de sexto de Primaria que se implantarán este año, que en Asturias se llevarán a cabo el 15 de junio y que no tendrán repercusión académica, se diseñarán en el Principado de forma que se "minimice" su efecto.
En este sentido, ha señalado que la prueba se realizará en un solo día y que sus resultados se notificarán a las familias y a los centros donde los alumnos vayan a continuar sus estudios, pero sin que sirvan para establecer ningún tipo de ránking ni de clasificación entre los colegios de Primaria.
"La evaluación es una cuestión que debe servir para la mejora del propio centro, pero no hay por qué clasificar ni comparar centros porque sus realidades son distintas y distantes. Esa clasificación sólo va en perjuicio de muchos y en beneficio de otros", ha añadido.
Con la regulación de las reválidas el Gobierno pretende llevar a cabo "una huida hacia delante con una ley que pretende suavizar y vender bondades que nosotros no vemos", ha apuntado, tras advertir de que resulta "impropio" de un Ejecutivo en funciones que plantee ahora en una Conferencia Sectorial la ratificación de varios borradores de Real Decreto.
Alonso ha apuntado además que el hecho de encontrarse en funciones fue el argumento que dio el Gobierno centro para no ratificar el Real Decreto que hubiera permitido la creación de la especialidad de lengua asturiana entre los docentes del Principado.