El asesor jurídico del Montepío asegura que su papel solo era validar la documentación
Afirma que el arquitecto fue quien defendió que la constructora era la mejor opción
El actual asesor jurídico del Montepío figura entre la veintena de investigados en el marco de la Operación Hulla.
Durante su declaración judicial, según fuentes cercanas al caso, se limitó a manifestar que él no intervino ni en la valoración técnica ni en la económica para la selección de empresas del geriátrico de Felechosa.
Esa valoración, según aseguró en sede judicial, la realizó el arquitecto y alguien de su equipo. Ellos fueron, según su testimonio, quienes en una asamblea general del Montepío, en 2008, defendieron por qué Alcedo de los Caballeros era la mejor opción para poner en marcha el geriátrico.
Su labor como asesor, ha asegurado en el juzgado, se limitó a validar la documentación jurídica presentada por las empresas.
También está investigado en esta causa el aparejador de la obra, Vicente Fernández. Durante su declaración judicial, aseguró que fue nombrado por el arquitecto y que su papel se limitó a llevar la dirección de ejecución de la obra del geriátrico.
Su firma, dice, aparece en las certificaciones de obra porque ese era parte de su cometido como integrante de la direccion facultativa, pero ha recalcado ante la jueza que no tenía un papel económico.
El actual asesor, el aparejador y el exasesor fiscal fueron los únicos investigados que aceptaron contestar a preguntas de la jueza y de los fiscales anticorrupción.
En el caso del exasesor fiscal, al que la investigación otorga un papel relevante en la trama, se limitó a explicar sus actuaciones.
Fuentes judiciales aseguran que se defendió pero no inculpó a nadie en esta supuesta trama de comisiones ilegales.