El uso del asturiano en la Junta enfrenta al Gobierno con PP, Cs y Vox

La presidencia de la mesa pide a Berta Piñán que utilice el castellano

El uso de la lengua asturiana por parte de la nueva consejera de Cultura, Política Llingüística y Turismo del Principado, Berta Piñán, ha generado este martes las quejas de PP, Ciudadanos y Vox, que han obligado a que su intervención ante el parlamento regional se hiciera en castellano.

PP y Vox han expresado sus protestas al inicio de la intervención de Piñán cuando ésta ha comenzado a exponer las líneas generales de su acción de gobierno en asturiano.

La diputada popular Gloria García ha exigido la traducción simultánea por su "derecho" a entender a la titular de Cultura, mientras que el de Vox, Ignacio Blanco, ha amenazado con abandonar la sala e incluso ha propuesto que, si se iba a utilizar una lengua no cooficial, podría optarse por el inglés para el mejor entendimiento de todos.

Desde Ciudadanos también se ha acusado a la consejera de hacer "puro teatro", puesto que ya se le había advertido hace días que el uso del asturiano en la cámara es una prerrogativa reservada a los parlamentarios.

Piñán ha contado con el respaldo del grupo parlamentario de Podemos, cuyo diputado Rafael Palacios ha protestado por lo que ha considerado una "censura".

Finalmente, la presidencia de la mesa pidió a la consejera que utilizase el castellano para expresarse apelando al reglamento de la cámara, que otorga a los diputados el derecho a utilizar el bable en el ejercicio de sus funciones parlamentarias, pero no menciona a otros comparecientes, incluidos los miembros del Gobierno.

Así, la consejera ha tenido que continuar en castellano, algo que ha considerado "humillante como ciudadana", y ha advertido de que situaciones como esta demuestran la importancia de que el asturiano cuenta con un "reconocimiento legal".

El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha salido en defensa de su consejera ante la actitud de "la extrema derecha" e impedir el uso del asturiano, una lengua que el mismo utilizó el pasado mes de julio para pronunciar algunas palabras de su discurso de investidura.

También se ha pronunciado sobre este asunto la Academia de la Llingua Asturiana, que ha considerado una "anomalía democrática" que Piñán no haya podido ofrecer su comparecencia en asturiano.

Esta polémica surgida en el parlamento asturiano, cuando todavía no ha arrancado el periodo de sesiones de la nueva legislatura, se produce después de que el propio Barbón se haya comprometido a impulsar la cooficialidad de acuerdo a la nueva postura adoptada por la FSA-PSOE respecto al asturiano.

Para ello sería necesaria una reforma del Estatuto de Autonomía que requeriría el apoyo de tres quintas partes del parlamento asturiano -27 de 45 escaños-, un apoyo insuficiente dado que a la suma de PSOE, Podemos e IU les faltaría un voto.

Por ello, Barbón pidió en su investidura a PP, Foro, Ciudadanos y Vox que no renieguen de su lengua y apuesten por un reconocimiento que evite su desaparición.

Asturias cuenta desde 1998 con una Ley de uso y promoción del asturiano para impulsar su uso, difusión y enseñanza y que, entre otros aspectos, establece que será válida cualquier comunicación oral o escrita de los ciudadanos con la administración regional.