Industria abonará los 180 millones por los costes por CO2 antes de fin de año
Barbón afirma en la Junta que el sector industrial sigue siendo "una prioridad absoluta"
El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha asegurado este miércoles que los 180 millones de euros que el Gobierno va a destinar a compensar a las empresas por las emisiones de CO2 se abonarán antes de que finalice el año.
El Consejo de Ministros aprobó el pasado abril la convocatoria para la concesión de subvenciones por un máximo de 91 millones, para compensar a grandes consumidores de energía eléctrica por los costes de emisiones indirectas de gases de efecto invernadero (CO2) de 2018.
La ministra de Industria, Reyes Maroto, le ha asegurado, según ha dicho hoy Barbón, que esa cantidad se va a duplicar y que se hará efectivo su pago antes de que finalice el año.
Esos más de 180 millones de euros suponen un cifra significativamente superior a la convocatoria de 2018, dotada con unos seis millones de euros.
Esta partida está destinada a compensar a la industria electrointensiva y a reforzar la competitividad de empresas radicadas en España que operan en mercados internacionales y que no pueden repercutir esos costes en el precio de venta de sus productos.
Barbón ha hecho este anuncio en el pleno de la Junta General del Principado en la respuesta a sendas preguntas de IU y el PP, en las que le pedían que explicase las medidas que ha adoptado o piensa adoptar para afrontar la crisis que padece el sector industrial asturiano y qué gestiones ha hecho con el gobierno central en el mismo sentido.
Barbón ha incidido en que desde que se constituyó su Gobierno el pasado 25 de julio se ha dedicado plenamente a defender la industria asturiana que, según ha subrayado, sigue siendo "una prioridad absoluta" para él.
Entre las gestiones que desde entonces ha llevado a cabo, ha citado la reivindicación de que se aplique un arancel ambiental en frontera que evite la competencia desleal de aquellos productores que no pagan por emisiones de CO2 o que se incremente la partida destinada a compensar las mismas.
"Esto es recibido con los brazos abiertos por las empresas", ha afirmado el presidente asturiano, que se ha mostrado convencido de que la industria asturiana sí que tiene futuro.
Con ese fin, su Ejecutivo trabajará, ha dicho, para su modernización y adecuación a las exigencias ambientales, para que se rebaje el precio de la energía, que se apliquen aranceles ambientales en frontera y se aumenten las compensaciones por las emisiones de CO2.
Ha asegurado que se han implicado "de forma permanente" con las empresas con problemas, como ha sido el caso de Alcoa, y actualmente con Vesuvius, que no solo considera que sea un grave caso de deslocalización de empresas, sino consecuencia de un "capitalismo salvaje que busca beneficios a cualquier precio".
A la portavoz del PP, Teresa Mallada, le ha pedido también que deje a un lado la demagogia y que no prometa lo que no se puede conseguir.
Previamente, Barbón había recordado que Mallada llegó a decir en Tinéu que ella como presidenta del Principado hubiese evitado el cierre de la térmica de Soutu, cuando sabe que se trata de una decisión empresarial derivada de una serie de exigencias comunitarias en materia ambiental que no se cumplen.
Mallada, previamente, había afeado a Barbón que al hablar de industria se olvide de hablar de las térmicas que se van a cerrar y le había recriminado que su Gobierno no aporte "confianza ni soluciones concretas" a los problemas que vive el sector industrial asturiano.
Para la diputada popular, tampoco dice nada positivo de la gestión de Barbón que durante el mitin que hace unos días dio el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, éste no asumiese ni un solo compromiso con Asturias.