Villa, obligado a ir al juzgado para continuar con su juicio por apropiación
Un testigo denuncia "trabas" para investigar las cuentas de Villa
El ex secretario general del SOMA-UGT, José Ángel Fernández Villa, ha sido obligado a comparecer hoy ante la Sección Tercera de la Audiencia Provincial que le juzga por un delito de apropiación indebida después de que no acudiese a la hora señalada para reanudar la vista oral.
Su abogada defensora, Ana García Boto, sí que lo hizo a la hora prevista, las 10:00, con un informe médico sobre el estado de salud de Villa, que la semana pasada volvió a ser hospitalizado durante dos días en la servicio de Cardiología del HUCA, pero que ya se encuentra en su domicilio desde el pasado viernes.
No obstante, el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial desestimó las alegaciones de la defensa sobre el estado de salud de su cliente y acordó que Fernández Villa compareciese ante el tribunal para poder continuar la vista oral del juicio, lo que hizo a las 10:30.
El ex líder sindical minero ingresó en el HUCA el pasado día 18, tras una jornada en la Audiencia Provincial en la que la declaración del actual líder del SOMA, José Luis Alperi, llevó a Fernández Villa a decir en la sala que lo que contaba era mentira.
Al evolucionar favorablemente, Villa fue dado de alta dos días después, el día 20, y desde entonces ha permanecido en su domicilio.
Un testigo denuncia "trabas" para investigar las cuentas de Villa
Ricardo Antuña, único miembro de la Junta de Administración del SOMA-UGT que cuestionó la contabilidad del sindicato durante la etapa del ex secretario general José Ángel Fernández Villa, ha asegurado hoy que sus compañeros "le pusieron todas las trabas posibles" cuando solicitó que se le facilitaran las cuentas del sindicato "de forma detallada".
El testigo ha declarado que esas trabas venían del hecho de que "no entendían" su forma de proceder al cuestionar una contabilidad que daban por válida.
Ricardo Antuña ha mantenido que las explicaciones que le ofrecían era que "todo estaba correcto y decían que eran miserias los gastos de unas colonias que eran un detalle para las mujeres que colaboraban en la fiesta de Rodiezmo".
Entre los peritos que han ratificado sus informes iniciales ha prestado declaración Mariano Bel, quien ha mantenido que en las cuentas del SOMA había "montones de salidas de caja" que no se sabía "a qué se debían".
Asimismo, ha corroborado que había un gran descontrol contable porque "había múltiples errores".
"En mi informe describo la variedad de errores que detecté porque las facturas por sí solas no significaban nada", ha señalado el perito durante la vista oral.
El perito ha incidido en que su informe no es una auditoría, pero eso no le ha impedido reconocer que en las cuentas analizadas ha apreciado que "los movimientos de caja son brutales y no se conciliaban las cuentas".
En la sesión de hoy han declarado dos peritos para el tema económico y el perito Francisco Diego Llaca, quien ha advertido que en algunos casos la firma que aparece no se corresponde con la de Fernández Villa, sino que es "la de otras personas".
En esta jornada también han prestado declaración el presidente del Montepío de la Minería y ex secretario de organización del SOMA en la etapa de Fernández Villa, Juan José González Pulgar, quien ha reconocido que siempre se necesitaban "dos firmas autorizadas" para hacer efectivos los cheques.
Por su parte, el ex presidente de Hunosa Juan Ramón García Secades ha ratificado sus declaraciones anteriores durante la vista oral celebrada en la Audiencia Provincial.
El juicio continuará el próximo miércoles, día 25, con los informes de las conclusiones definitivas.
Caso Hulla
Sobre otro proceso judicial en el que está inmerso Villa, el caso Hulla, el presidente del Montepío, Juan José Pulgar, insiste en que hay que investigar la compraventa y permuta de los apartamentos de roquetas del mar y los alcáceres.
Unas diligencias que la Fiscalía abrió en agosto del pasado año y archivó un mes después al entender que los hechos investigados estaban prescritos. Desde el Montepío insisten en que se incorporen a la causa.