Feijóo consolida la mayoría absoluta y Urkullu mejora en el País Vasco

Resultado "negativo" para el PSOE en ambas comunidades

Alberto Núñez Feijóo ha consolidado hoy su mayoría absoluta en Galicia, la única que queda en el mapa autonómico, mientras que Íñigo Urkullu ha mejorado los resultados que tenía en el País Vasco, tras los comicios celebrados en ambas comunidades, en las que se han derrumbado los socialistas.

Un resultado "negativo" para el PSOE, según ha admitido su secretario de Organización, César Luena, en una breve declaración sin preguntas ante la prensa al filo de la media noche, en la que también ha dicho que la campaña electoral se ha desarrollado en unas condiciones "muy difíciles" para los socialistas.

Las elecciones -que han dejado sin representación a Ciudadanos- han transcurrido con tranquilidad en las dos comunidades, con una participación desigual: los gallegos han acudido a votar más que hace cuatro años y los vascos, menos.

El PP tiene casi la mitad de los votos en Galicia (47,54%) y 41 diputados, los mismos que tuvo en las elecciones de 2012, seguido de En Marea, que da el "sorpasso" al PSdeG en votos (19,06% frente a 17,88%), aunque empatan en escaños, 14.

Los socialistas pierden cuatro representantes respecto a hace cuatro años y En Marea gana cinco si se compara con la confluencia de izquierdas que se presentó hace cuatro años a los comicios.

Completa el Parlamento gallego la presencia del BNG, que con el 8,36% de los votos mantiene el tipo y sólo pierde uno de los siete escaños que obtuvo en 2012.

Mientras tanto, en Euskadi el PNV ha logrado mejorar sus resultados de hace cuatro años y pasa del 34,61 al 37,65% de los votos y de 27 a 29 parlamentarios, y es el único partido que mejora de los que ya tenían representación, ya que tanto EH Bildu como PSE y PP empeoran respecto a hace cuatro años, en favor de Podemos, que entra por primera vez en este Parlamento con 11 diputados, algunos menos de los que vaticinaban las encuestas.

Bildu baja del 25 al 21,23% de los votos y de 21 a 17 escaños; el PSE cae del 19,14 al 11,94% de las papeletas y de 16 a 9 diputados, y el PP, del 11,75 al 10,16% de los sufragios y de 10 a 9 representantes. UPyD, que sacó un escaño en 2012, no se ha presentado a estas elecciones.

Nada más confirmarse estos datos, el presidente del PP, Mariano Rajoy, que ha seguido la noche electoral desde Génova acompañado por la plana mayor de su partido, ha telefoneado a Feijóo y a Urkullu, a los que ha felicitado, y también ha hablado con el candidato de su partido en Euskadi, Alfonso Alonso.

Urkullu ha asumido el reto de formar Gobierno y de llevar a cabo las ideas del PNV mediante el diálogo y el acuerdo, al tiempo que ha reiterado su voluntad de lograr un acuerdo plural para mejorar el autogobierno vasco y conseguir una relación de "bilateralidad" con el Estado.

Al PNV ha tendido la mano el secretario general de Sortu, Arnaldo Otegi, para conformar "una gran mayoría de país que consolide un Gobierno de progreso en lo nacional y lo social" en Euskadi.

En Twitter, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, se ha felicitado por los resultados obtenidos por las candidaturas integradas por su partido en Galicia y el País Vasco: "Nuestro país ya no se entiende sin Unidos Podemos", ha escrito.

Y en esa idea ha coincidido con su número dos, Íñigo Errejón, que ha realizado una reflexión similar a través de la misma red social: "Incluso en medio del bloqueo, las elecciones gallegas y vascas muestran que no hay vuelta atrás en el proceso de cambio. Bye bipartidismo!".

"Miramos al futuro esperanzados, hoy comienza todo", ha señalado, por su parte, la candidata de Podemos en el País Vasco, Pîlar Zabala, mientras que la del PSE-EE, Idoaia Mendia, ha reconocido los malos resultados de los socialistas y ha señalado que todos los partidos están obligados a "dialogar y buscar acuerdos" para conformar el próximo Gobierno Vasco.

Alfonso Alonso ha sido uno de los primeros en hacer una lectura en clave nacional de estos resultados y ha sido para enviar un mensaje a los socialistas, a quienes ha pedido que tomen nota de su "descalabro" en el País Vasco y Galicia.

Desde Galicia, Feijóo ha mostrado su felicidad por su tercera mayoría absoluta consecutiva, en unas elecciones en las que Galicia ha hablado con "mucha claridad". También ha prometido "trabajar" para "estar a la altura".

El candidato del PSdeG, Xoaquín Fernández Leiceaga, ha evitado definir como un fracaso la caída en votos de su partido, pero ha prometido una "reflexión seria" para evaluar las causas y las consecuencias y hacer una "oposición constructiva" durante los próximos cuatro años.

Sin embargo, el candidato de En Marea, Luis Villares, ha asumido el papel de antagonista del PP como segunda fuerza más votada, en tanto que la aspirante del BNG, Ana Pontón, se ha felicitado por haber remontado los malos datos que les auguraban las encuestas.

Galicia habla con "claridad"

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha mostrado su felicidad por haber logrado algo que resulta excepcional en el contexto actual, como él reconoce, su tercera mayoría absoluta, en unas elecciones en las que Galicia ha hablado con "mucha claridad" y con "sentidiño".

En una conferencia de prensa en el hotel donde su partido ha seguido el recuento electoral, situado en Compostela, Feijóo, recibido entre gritos de presidente, y arropado en los instantes previos a su intervención por su madre, su hermana y su pareja y madre de su futuro hijo, ha agradecido que la Comunidad hablase "libre y democráticamente" y le diese otra vez el Gobierno.

Núñez Feijóo ha repartido varios elogios y uno de ellos ha estado dirigido al líder nacional del PP, Mariano Rajoy, porque éste es el resultado "del PP de toda España".

De Rajoy ha recordado que hizo con él la mitad de la campaña, de forma paralela ambos, para multiplicar los impactos, y el resultado ha sido de éxito.

"Somos un gran partido", ha refrendado Feijóo, en alusión al PP, que fundó Manuel Fraga y preside otro gallego, Mariano Rajoy, de manera que está "lleno de gallegos y esa es una buena señal para todos".

El mandatario autonómico ha tenido palabras de gratitud para su pueblo y ha dicho en general que responderá a la confianza otorgada al intentar "estar a la altura".

En el momento más emocionante de su discurso, ha aludido a una llamada que hizo en 2009, cuando alcanzó la Xunta por vez primera, y repitió en 2012, pero ahora no puede, y esta comunicación era con su padre, Saturnino, que falleció este verano.

Feijóo, que ha estado arropado por su hermana, su madre, a la que ha dedicado un mensaje muy cariñoso, y su pareja y madre de su futuro hijo, ha agradecido a todos su apoyo: "Nno eligieron vivir esto, pero yo no podría vivirlo sin todos ellos".

"Gracias especiales para mi madre", ha expresado, y ha deseado una Galicia mejor. "Un mejor lugar para nuestros hijos, para los que nos han de suceder".

"Yo no gané nada solo", ha enfatizado, y ha descrito ésta como la victoria de "un pueblo que habló con claridad y contundencia", una excepción en un "pueblo excepcional".

Así, ha afirmado que las "grandes victorias" son que un joven encuentre trabajo y que las familias lleguen bien a fin de mes, algo por lo que peleará.

"Este pueblo lo que tiene es mucho sentidiño", ha asegurado, en alusión al sentido común, y ha aplaudido el hecho de que en Galicia no vaya a haber "bloqueos, líneas rojas, vetos ni parálisis".

Por último, al igual que ha repetido en otras ocasiones, ha comentado que no hay mayor honor que servir a su tierra.

"Hoy lo reitero, para mí es el mayor honor que puede tener un gallego que se dedica a la política".

Núñez Feijóo ha desvelado que le ha llamado el lehendakari Íñigo Urkullu, para felicitarle, y él ha aprovechado para hacer lo propio; también ha hablado con el candidato del PSdeG, Xoaquín Fernández Leiceaga, y con el de En Marea, Luis Villares.

Y Núñez Feijóo ha concluido con un rotundo: "Por fin hay una excepción de unidad, de estabilidad y de responsabilidad".

Urkullu dialogará con todos los partidos para buscar la estabilidad

Por su parte, el candidato del PNV a la reelección como lehendakari, Iñigo Urkullu, ha agradecido hoy la victoria en las elecciones vascas y ha anunciado que comenzará a dialogar con todos los partidos para dotar de "estabilidad y fortaleza" al próximo Gobierno Vasco.

Urkullu, recibido al grito de "ari ari ari, Urkullu lehendakari", ha asumido la "responsabilidad" de formar el nuevo Gobierno Vasco y el presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha dicho que mañana mismo el Euzkadi Buru Batzar (EBB) y Urkullu contactarán con el resto de las formaciones para "conformar cuanto antes las instituciones vascas".

El lehendakari ha reiterado su voluntad de lograr un "acuerdo plural entre diferentes" para mejorar el autogobierno vasco con un nuevo pacto con el Estado "de igual a igual, con bilateralidad y reconocimiento nacional".

"Más autogobierno para tener más bienestar", ha dicho Urkullu, que ha insistido en el "reto compartido" de bajar la tasa de paro por debajo del 10 por ciento y consolidar las políticas sociales.

El candidato del PNV ha felicitado a todos los partidos por una "campaña limpia y de ideas" y les ha invitado a "seguir hablando con franqueza y diálogo constructivo".

Urkullu se ha mostrado "satisfecho" por el resultado y por haber recibido la "confianza" que pidió en campaña a la sociedad vasca.