Fuente: EFE, 22 de septiembre. 2021 13:52

Las comunidades afectadas por el estatus del lobo pedirán la paralización cautelar de la orden la próxima semana

Ejemplar de lobo

Asturias, Castilla y León, Galicia y Cantabria se reunirán para coordinar el recurso judicial

Las Comunidades Autónomas que entienden verse afectadas por el nuevo estatus del lobo, que desde hoy es una especie no cinegética en toda España, se reunirán de forma presencial la próxima semana para coordinar la presentación de un recurso contencioso administrativo ante la Audiencia Nacional que paralice de forma cautelar la inclusión del lobo en el Listado de Especies en Régimen de Protección Especial (Lespre).

Así lo ha asegurado este miércoles en declaraciones a los medios el consejero de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, quien ha informado de que la próxima semana mantendrá un encuentro presencial con sus homólogos de Galicia, Asturias y Cantabria para coordinar, también junto a las Organizaciones Profesionales Agrarias, este recurso judicial.

Como ha detallado, la fórmula finalmente escogida es la petición de medidas cautelares y no cautelarísimas -que no permitiría al Gobierno presentar sus alegaciones- aunque ha asegurado que cada minuto que se pierde es un "perjuicio" para el mundo rural y el sector ganadero en la Comunidad. "Esperamos que la Audiencia haga una tramitación rápida", ha añadido.

Sobre el bloque común que formarán estas Comunidades, Suárez-Quiñones ha asegurado que los territorios han dejado a un lado los posicionamientos políticos de cada autonomía, ya que en la lucha contra este nuevo estatus del lobo están representado casi "todo el arco político", de modo que ha negado que desde Asturias se haya mantenido una posición más tibia por compartir siglas su Gobierno con el de España.

"No sabemos lo que defiende el Ministerio de Transición Ecológica, desde luego los intereses generales no", ha zanjado el consejero, quien ha subrayado que la prohibición de la caza del lobo ahora también al norte del Duero va a ser "terriblemente dañino", tanto para el sector ganadero como para el mundo rural.