Fuente: EFE, 4 de diciembre. 2015 21:14

Castillejo defiende su gestión y afirma que siempre actuó por orden del SOMA

 El exsecretario de la Fundación Instituto para la Formación, la Investigación, la Documentación y los Estudios Sociales (Infide), Pedro Castillejo

"A mí se me ha usado para llegar a José Ángel (Fernández Villa)"

El exsecretario de la Fundación Instituto para la Formación, la Investigación, la Documentación y los Estudios Sociales (Infide), Pedro Castillejo, ha defendido hoy su gestión al frente de este organismo dependiente del SOMA-FIA-UGT a cuyos mandatos, ha asegurado, obedeció siempre para ejercer su actividad.

Castillejo ha ofrecido hoy una rueda de prensa para responder a la decisión de los actuales responsables del sindicato de presentar una querella criminal contra él por un presunto delito de apropiación indebida de los fondos de la Fundación por la que le reclama 68.604.

El ex responsable de Infide, uno de los más estrechos colaboradores del ex secretario general del SOMA-UGT, José Ángel Fernández Villa, contra el que el sindicato se ha querellado también, ha hecho un repaso de su actuación desde 1993 al frente de esta institución de la que afirma no haber cobrado ninguna remuneración ya que percibía una pensión como jubilado de Hunosa.

"A mí se me ha usado para llegar a José Ángel (Fernández Villa)", ha afirmado tras advertir de que sufre "una indefensión total" ante lo que considera un ataque por parte de su ex compañeros del SOMA-UGT por una gestión en el Infide en la que admite que pudo haber "mala praxis" a la hora de contabilizar los gastos.

No obstante, ha subrayado que la gestión contable de la Fundación corría a cargo de la misma persona que la llevaba a cabo en el sindicato sin que nadie le apercibiera nunca de la existencia de irregularidades "y si alguno hubo serían tan responsables como yo".

Castillejo ha abogado por que en el proceso que se abra tras la presentación de la querella se conozcan todos los gastos que se le imputan como supuestamente injustificados dado que, ha afirmado, podrá "recomponer su agenda" a partir de ellos y demostrar que correspondían a fondos utilizados para desplazamientos, comidas o atenciones a terceras personas para realizar su tarea.

Así, ha recordado que desde el SOMA se encargó al Infide, en el que sólo según afirma disponía de tarjeta de crédito para realizar gastos, organizar multitud de actividades como jornadas o congresos, colaborar en la fiesta de Rodiezmo o programas los actos con motivo del centenario de la fundación del SOMA-UGT.

Entre las cuestiones de las que tuvo que encargarse como responsable de Infide se incluyó toda la logística de la marcha minera que llevó de Asturias a Madrid a varios centenares de trabajadores en 2012, una actividad que generó gastos cargados a las cuentas de la Fundación.

Como ejemplo ha mencionado una cena en Los Ángeles de San Rafael, abonada con cargo a su tarjeta de Infide, en la que estuvieron responsables del sindicato minero acompañados de familiares como el actual secretario de organización del SOMA-FIA-UGT, José Luis Fernández Roces.

"No existe una hoja de gastos que dicen que no tienen soporte justificativo. Que hubiera mala praxis de acuerdo, pero no enriquecimiento ilícito y lo que no me creo es que haya una sola factura ni sé qué habrá pasado con ellas", ha añadido tras advertir de que todas esas cantidades puede justificarlas con los trabajos que realizó el Infide en los años que estuvo al frente.

Castillejo ha reiterado que no le consta que Fernández Villa, investigado por la Fiscalía Anticorrupción tras regularizar una fortuna oculta de 1,4 millones de euros, cobrase nunca del Infide y ha afirmado no mantener "por respeto" ningún contacto con el ex secretario general del SOMA-UGT dado que las informaciones que le llegan apuntan a que su estado de salud sigue siendo malo.

"Quiero tener el recuerdo de aquellos tiempos. Yo también soy de Tuilla y toda mi vida he andado de la mano de él. Lo respeto como persona. Él sabrá lo que ha pasado, pero le deseo lo mejor", ha afirmado respecto a Villa al que conserva "el afecto personal" pese a haberse quedado "frío" y sin entender "nada" cuando conoció la noticia de que se había acogido a la amnistía fiscal.