Fuente: EFE, 5 de mayo. 2016 14:35

Riopedre no cobró de las empresas aunque intercedió en beneficio de su hijo

José Luis Iglesias Riopedre

Declara la Policía que investigó el caso Renedo

Las escuchas telefónicas sobre conversaciones entre los acusados del caso Marea, el mayor juicio por corrupción abierto en Asturias, permitieron ver que se trataba de un "entramado", según ha dicho hoy un agente de la investigación, que ha añadido que Riopedre no percibió un euro, pero sí que aprovechó en favor de su hijo.

Así lo ha manifestado uno de los miembros de la Unidad de Delitos Económicos del Cuerpo Nacional de la Policía Nacional, citado en la causa como testigo y perito, en su declaración en la séptima jornada del juicio que se celebra en la Audiencia de Oviedo con trece procesados, entre ellos el ex consejero socialista José Luis Iglesias Riopedre, y su número dos en el departamento de Educación, María Jesús Otero.

Los siete principales acusados de participar en esta trama de adjudicación de contratos públicos afrontan una petición del fiscal de penas que suman 57 años de prisión, mientras que los otros seis sólo están señalados como presuntos autores de un delito de cohecho por las acusaciones populares.

Las empresas Igrafo y Almacenes Pumarín han realizado ingresos en las cuentas bancarias abiertas a nombre de dos mujeres por Marta Renedo, que también ha transferido miles de euros procedentes del Principado, según ha señalado el jefe de grupo de la Unidad de Delincuencia Económica de la Comisaría de Gijón.

Ha abundado que el contenido de las conversaciones telefónicas interceptadas ha permitido averiguar que Riopedre daba órdenes a Otero sobre contrataciones, y ha argumentado que la sospecha sobre el trato de favor hacia Igrafo y Pumarín se basó en hechos como la contratación por parte de la primera, para obra en un colegio, de un carpintero por importe de 4.000 euros para un servicio por el que esta empresa pasó factura a la Consejería por 7.000.

El inicio de la investigación policial, ha puntualizado, se produjo a raíz de la presentación en la comisaría de Azucena V., quien comunicó que por la Agencia Tributaria tuvo conocimiento de haber recibido en su cuenta ingresos por importe de 134.000 euros, y a los pocos días recibió una llamada de Renedo, que se identificó como funcionaria, y le ofreció una serie de disculpas al asegurar que había sido un error.

A continuación, ha agregado que Azucena V., ante una nueva llamada de la Agencia para comunicarle que tiene abierta una cuenta en Bankinter, volvió a ponerse en contacto con Renedo, que le dijo que no se preocupara y que ella lo solucionaría.

Azucena V. se citó con Renedo en Oviedo, aprovechando para ir a la oficina de Bankinter en la ciudad, donde le aconsejaron que interpusiese una denuncia, y acompañada por su marido acudió al despacho de Renedo, quien le sugirió que "no es bueno" que presente denuncia, le ofreció una compensación y le aseguró que "van a rodar cabezas en el Principado".

El agente ha añadido que Renedo, que se presentó a los pocos días en casa de Azucena V. para pedirle disculpas, fue identificada a continuación por la Policía, que conoció que se trataba de la jefa de procesos administrativos de la Consejería.

Entre los movimientos investigados, ha revelado ingresos en los años 2008 y 2009 de unos 250.000 euros procedentes de la Administración regional en la cuenta con identidad de Azucena V. así como una cuantía de 45.832 euros a favor de Severina B.

Para acometer una investigación "más profunda", ha agregado, se recurrió a intervenir mediante escucha los tres teléfonos que utilizaba Renedo, que en una de las primeras investigaciones mantuvo una conversación con Víctor Manuel Muñiz, entonces no identificado por los agentes.

A los pocos días, ha indicado que Renedo comunicó a Muñiz que había podido recaudar 6 millones -de pesetas- durante el fin de semana, momento en el que el dueño de Igrafo fue identificado e su teléfono intervenido.

En referencia a la entonces directora de Infraestructuras, María Jesús Otero, ha revelado que en una primera conversación con empresarios tomada en abril de 2010, "sorprende ver" como plantea cómo hacer una oferta para empresas cercanas a Muñiz, lo que motivó la intervención de su teléfono, y más tarde la del gerente de Almacenes Pumarín, Alfonso Carlos Sánchez.

Otero pedía que los contratos favoreciese a Igrafo y Pumarín, que coincidían como destinatarios del reparto de adjudicaciones, ha manifestado el agente.

El registro policial en el despacho de Renedo, ha agregado, permitió hallar un sobre con datos de Pilar Fernández, que contenía recortes con una composición sobre esta persona que había optado a ayudas al retorno de emigrantes por importe de 1.200 euros.

Ante la sospecha sobre otros ingresos de Pumarín, ha indicado que el responsable de la empresa manifestó que en 2008 recibió por adelantado el pago de 248.000 euros, y que a continuación Renedo le dijo que ese pago no se iba a realizar al surgir otras prioridades, y le pidió que reintegrase la cantidad en una cuenta de Implants Monts.

Desde 2004 al año 2010, ha agregado, se detectaron pagos de hasta 310.000 euros procedentes del Principado y de empresas al equipo de baloncesto en el que militaba la hija de Renedo.

Respecto a Geogal, la empresa a nombre de la esposa y el hijo de Riopedre, dedicada a actividad relacionada con obras de geotermia, ha dicho que contó con muchos pagos que se fueron incrementando, con mayores cantidades en 2009 y 2010.