Renedo acusa a sus superiores de ordenar la tramitación de facturas falsas

El tribunal rechaza las peticiones de nulidad de las defensas

El tribunal que juzga el caso Renedo, la mayor causa por corrupción abierta en Asturias por presuntas irregularidades en la adjudicación de contratos públicos, ha dictado un auto en el que rechaza las peticiones de nulidad formuladas por las defensas de algunos de los trece acusados.

El auto, que se ha hecho público antes de que el tribunal empiece a tomar declaración a los acusados, no atiende así la petición realizada por las defensas de declarar nulas las escuchas telefónicas y de los registros realizados durante la fase de instrucción, a excepción de las conversaciones que mantuvo la exfuncionaria Marta Renedo, una de las principales acusadas, con su abogado, y de las que el tribunal no extraerá ningún elemento de cargo.

Renedo acusa a sus superiores de ordenar la tramitación de facturas falsas

La ex jefa del servicio del Principado de Asturias Marta Renedo ha acusado hoy a dos de sus ex directores generales en la administración autonómica de haberle ordenado que se pusiera en contacto con proveedores para emitir facturas falsas a través de contratos menores por obras no realizadas.

Según Renedo, esta práctica era habitual al final de cada ejercicio para poder atender todos los compromisos adquiridos por la administración autonómica a lo largo del año y particularmente en ejercicios en los que se celebraban procesos electorales.

Renedo, para la que la Fiscalía pide diez años de cárcel, ha sido la primera de los 13 acusados en testificar ante el tribunal.

La funcionaria, que sólo ha contestado a las preguntas de su defensa durante casi media hora, ha acusado directamente a los ex directores de Cultura, Carlos Madera, y de Modernización, Alberto Pérez Cueto, de haber dado directamente esas órdenes aunque ha asegurado desconocer si esos mandatos procedían de los consejeros o si éstos los conocían.

Además, ha acusado al Principado, personado como acusación particular, de haber hecho desaparecer determinados documentos originales y de haber presentado otros "falsos" para eludir la responsabilidad de los directores en la firma de algunos contratos.

Según su testimonio, sus problemas comenzaron cuando no aceptó la petición que le planteó Pérez Cueto de que una empresa creada por ella realizase la misma función que compañías como Igrafo, cuyo propietario está también procesado, para sumarse a esa bolsa de contratos supuestamente falsos con los que satisfacer compromisos de gasto adquiridos pese a no contar con consignación presupuestaria.

"Le dije que no y ahí vinieron los problemas", ha afirmado además de asegurar que se contrató a personal que trabajaba en la Consejería a través de la empresa Asac, cuyo responsable figura entre los acusados, y que, dado que no se les podía pagar directamente, el gasto se abonaba a la compañía "a través de una ficción de inversiones" por orden de Carlos Madera.

La funcionaria está acusada de participar desde su cargo como jefa de servicio en tres consejerías distintas en una presunta trama dedicada a amañar contratos con distintos proveedores que la llevó presuntamente a falsificar las firmas de sus superiores.

El gerente de ASAC reconoce que Renedo le mandó facturar obras que no se realizaron

El gerente de ASAC Comunicaciones, Maximino Fernández, ha reconocido hoy que la ex funcionaria Marta Renedo le mandó facturar obras de cableado en centros sociales de Asturias que después no se realizaron. El acusado ha reconocido que realizó la facturación de estas obras que "no se llegaron a hacer" pese haber sido facturadas para hacer un favor al Principado.

"Hay que poner las cosas en su día, en ese tiempo era habitual esta forma de actuar", ha subrayado Fernández, que ha recalcado que que en aquellos tiempos el Principado ponía las condiciones.

En relación al patrocinio de un club de baloncesto femenino -en el que jugaba una hija de Renedo- por importe de 35.000 euros, el gerente de Asac ha dicho que su empresa gasta mucho dinero en subvenciones a equipos deportivos, unos 300.000 euros. Ha señalado que conoció a Renedo gracias a su amistad con el ex director general de Cultura Carlos Madera.

Ha asegurado que no mantenía "una relación fluida" con Renedo ya que, después de establecer el contacto, eran sus trabajadores los que trataban directamente con la ex funcionaria.

Pendás: "No tenía capacidad ni competencias" para realizar contratos

Por su parte, la  funcionaria del Ayuntamiento de Oviedo, María Paz Rodríguez Pendás, ha asegurado que en su puesto de trabajo en el consistorio "no tenía capacidad ni competencias" para la contratación de obras.

Rodríguez Pendás, que afronta una pena de dos años de cárcel por un delito de cohecho sólo a petición de las acusaciones particulares, sólo ha querido responder a las preguntas de su abogado defensor, mientras que la Fiscalía ha rehusado interrogarla.

Rodríguez Pendás, funcionaria municipal desde hace 32 años, donde ha ocupado la coordinación general de Deportes del Ayuntamiento de Oviedo, ha precisado que la potestad para realizar las contrataciones es competencia de otras concejalías.

Ha asegurado que no ha mantenido relación laboral o personal con los gerentes de Igrafo y de Almacenes Pumarín, que están personados en causa también como acusados, y, en concreto, ha apuntado que Alfonso Carlos Sánchez (Almacenes Pumarín), lo conoció "hace tres días en esta sala".

En declaraciones a su abogado, Rodríguez Pendas ha desmentido también que alguna empresa relacionada con el Ayuntamiento hubiera realizado obras en su casa.

No obstante, sí ha admitido que era poseedora de tarjetas de El Corte Inglés, ya que unos compañeros del trabajo se las vendían "baratas", a 400 euros las de 600 y al 250 a 300.